"Nunca antes ha habido tantas personas en Nigeria sin comida", dijo la portavoz del Programa Mundial de Alimentos (PMA) en Nigeria, Chi Lael, en un comunicado remitido a EFE este miércoles y lanzado conjuntamente con el Fondo de la ONU para la Infancia (Unicef) y la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Esta cifra supondría un aumento significativo respecto a los 25 millones de personas que se estima que necesitan ayuda alimentaria entre octubre y diciembre de 2024 en el país.
"Es necesaria una ayuda inmediata para evitar un posible desastre alimentario en Nigeria, donde la combinación de aumentos de tres dígitos en los precios de los alimentos, las secuelas de las devastadoras inundaciones y quince años de insurgencia (yihadista) en el noreste están llevando a las familias al límite", aseveró Lael.
El noreste del país es, precisamente, la zona más golpeada por esta crisis alimentaria, incluyendo los estados de Borno, Adamawa y Yobe; aunque también podrían surgir focos de hambre en Zamfara, Katsina y Sokoto, en el noroeste.
Según la ONU, unos 5,4 millones de niños y cerca de 800.000 mujeres embarazadas y lactantes se encuentran en riesgo de desnutrición aguda o emaciación, una forma de malnutrición que puede ser mortal y que provoca una delgadez y debilidad extremas en los niños, así como deficiencias en su crecimiento, desarrollo y capacidad de aprendizaje.
Ese número incluye 1,8 millones de menores que podrían sufrir desnutrición aguda grave y requerir tratamiento nutricional para sobrevivir.
"Lo que más nos preocupa es la velocidad del deterioro en el último año" y "el riesgo muy real de un empeoramiento significativo en los próximos meses", aseveró la portavoz del PMA.
La ONU hizo esta advertencia después de las masivas protestas convocadas en Nigeria el pasado agosto, en las que miles de personas salieron a las calles contra el alto coste de la vida y la mala gobernanza.
Solo en la primera jornada de esas movilizaciones, al menos 21 personas murieron, según confirmó entonces a EFE el Frente de Acción Unida de la Sociedad Civil (UFCS), uno de los grupos que lideraron las marchas, mientras Amnistía Internacional cifró en trece los fallecidos.
Días después del inicio de las movilizaciones, el presidente nigeriano, Bola Tinubu, se comprometió a "resolver" las preocupaciones de los jóvenes, al asegurar que algunas medidas controvertidas que tomó desde su llegada al poder en mayo de 2023 -como la retirada del subsidio sobre el combustible- eran necesarias para "salvar la economía".
El coste de la vida en Nigeria no ha dejado de subir durante su mandato, con la inflación alcanzando el pasado junio un máximo histórico del 33,95 %, lo que ha disparado los precios de productos básicos.
Nigeria es el país más poblado de África, con más de 213 millones de habitantes, y uno de sus principales productores de petróleo, así como una de las mayores economías del continente.
Sin embargo, cuatro de cada diez nigerianos viven por debajo del umbral de la pobreza, según el Banco Mundial.