La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) de México y la Agencia Espacial Mexicana (AEM) confirmaron que el “Mecanismo Compatible Biomimético-1”, denominado ‘MCB-1’, despegó la noche del lunes a bordo de un cohete ‘Falcon-9’ de SpaceX, desde Cabo Cañaveral, en la costa este de Florida, en Estados Unidos.
El experimento mexicano ‘MCB-1’ es un material inteligente inspirado en estructuras biológicas naturales, como las fibras musculares, que pueden recordar su forma y adaptarse a cambios de temperatura.
Su misión es comprobar cómo responde este material a las rigurosas condiciones del espacio durante seis meses en el módulo de la EEI, donde será expuesto a temperaturas que varían entre -100 °C y 120 °C, condiciones que pocos materiales pueden soportar sin romperse.
El innovador proyecto tiene aplicaciones potenciales en la construcción de satélites y en futuras misiones hacia la Luna, según explicó la AEM.
“MCB-1 tiene una memoria térmica de forma, es un material inteligente inspirado en la biología terrestre, que ahora se probará en el espacio”, detalló.
Su capacidad para “recordar” su forma y soportar cambios extremos lo hace especialmente útil para la exploración espacial, donde las condiciones son mucho más severas que en la Tierra.
El equipo ‘Mat X Space’ está formado por los jóvenes investigadores mexicanos Laura Barajas, Jonathan Cruz, Maximiliano Flores, Iván Galaviz, Aurea Guzmán, Flavio Heredia, Gerardo Pérez, José Rodríguez, Omar Saldaña, Arlette Silva, y Nadia Zenteno, quienes han puesto en alto el nombre de México en la ciencia espacial con este proyecto.
Dicho proyecto, fue recientemente presentado en el Congreso Internacional de Astronáutica 2024, donde fue reconocido por su innovación entre entidades como la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, mejor conocida como la NASA.