Con movimientos pausados, bostezos prolongados y estiramientos continuos, una de las crías de panda cautivó la atención del público que aguardaba con paciencia su turno en una larga línea que atravesaba el zoo para ver de cerca a los gemelos cachorros.
“Apenas se mueve el bebé, está durmiendo, pero produce mucha ternura”, afirmó a EFE Inga, una visitante que aguardó más de 30 minutos en la fila junto a su hija pequeña para ver las crías.
A partir de este miércoles, las dos hembras cachorras junto con su madre, Meng Meng, de 11 años, saludarán a los visitantes durante una hora diaria desde las 13.30 (11.30 GMT) en el Jardín de los Pandas.
"Ver una cría de panda con tus propios ojos es algo muy especial, incluso para los veteranos de los zoológicos como yo", afirmó en un comunicado el director del zoo de Berlín, Andreas Knieriem.
El debut de las crías, casi ocho semanas después de su nacimiento, contó con la presencia de una multitud de visitantes entre turistas y locales, personal del zoológico, un grupo de expertos que incluye un especialista chino de Base Panda de Chengdu y la mirada curiosa de decenas de niños y niñas.
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Entre la exhibición y el cuidado de mamá panda
Los cachorros se turnaron para la visita, mientras uno se quedaba con la madre panda entre bastidores, mamaba la leche materna y disfrutaba de su calor, el otro se acurrucaba en la ‘cama panda’ y era atendido por los cuidadores.
"Normalmente, las madres solo crían un osezno. Pero en animales tan amenazados como el panda gigante, cada cría tiene una importancia enorme", explicó en el comunicado Florian Sicks, biólogo y conservador del panda.
Agregó que para tener un ambiente adecuado, el grueso cristal del recinto interior amortigua eficazmente el ruido exterior, y la temperatura se mantendrá constante.
Las crías de 2,5 kilogramos, que han subido de peso desde su nacimiento en agosto y apenas pueden mantener sus ojos abiertos, son hijos de la osa Meng Meng y de Jiao Quing (14 años). Ambos llegaron a Berlín en junio de 2017, cedidos por el Gobierno chino, que sigue siendo su propietario oficial.
En marzo pasado, tras una intensa observación y una cuidadosa preparación por parte de un equipo internacional de expertos, Meng Meng fue sometida a inseminación artificial.
Las hembras de pandas gigantes únicamente son fértiles unas 72 horas al año, y la fragmentación del hábitat dificulta que los pandas encuentren pareja durante la época de cría.
En 2019 Meng Meng ya dio a luz a dos bebés pandas, Pit y Paule, quienes fueron los primeros cachorros de panda nacidos en Alemania.
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Más tarde en 2023 los cachorros fueron enviados a la Base Panda de Chengdu, como se acordó en 2017 con la llamada “diplomacia del panda”, que implementó Pekín.
El zoológico de Berlín es el hogar de los únicos pandas gigantes en el país germano, es por ello que muchos visitantes llegan a la capital alemana esperando conocer las nuevas crías de panda.
"Deberían enviar uno de los cachorros pandas a Colonia", comentó a EFE Ramona, quien reside en esta ciudad del oeste alemán. Además añadió que el cachorro panda es mucho más "grande" de lo que esperaba.
El panda gigante está considerado el oso más raro del planeta. Sin medidas de conservación, lo más probable es que ya se hubiera extinguido.
“Estoy muy contento de que ambas crías se estén desarrollando tan bien, ahora nuestros visitantes pueden ver crecer a los gemelos panda y aprender más sobre el desarrollo de estos animales fascinantes y en peligro de extinción”, señaló el director del zoológico.