El líder de la oposición en la Lok Sabha o Cámara Baja del Parlamento indio, Rahul Gandhi, abogó por recuperar la condición de estado para esta región, cuyo estatus de semiautonomía fue revocado en 2019 por el Gobierno tras la derogación del artículo 370 de la constitución del país asiático.
"Tras la derogación del artículo 370, la gente de aquí se ha visto privada de sus derechos básicos", dijo Gandhi en un acto en el distrito de Ramban al que acudieron miles de personas.
El Ejecutivo del primer ministro, Narendra Modi, eliminó hace cinco años el estatuto de semiautonomía de la Cachemira india, y al mismo tiempo la región se vio rebajada a la categoría de un territorio de la unión.
Esta consideración administrativa supone una rebaja significativa de las competencias de las autoridades locales y otorga un gran poder al Gobierno central.
"La definición de democracia no encaja en un lugar que ha sido rebajado de estado a territorio de la unión", lamentó el delfín de la dinastía Nehru-Gandhi.
Jammu y Cachemira celebrará unas elecciones en tres fases, que arrancarán el 18 de septiembre y finalizarán el 1 de octubre, y cuyos resultados se esperan el 8 de octubre. Se trata de los primeros comicios regionales en una década, aunque la región sí votó en las elecciones generales que finalizaron el pasado junio.
El ministro del Interior indio, Amit Shah, mano derecha de Modi, visitará la región el 6 de septiembre para iniciar oficialmente la campaña del partido nacionalista hindú Bharatiya Janata Party (BJP).
La fuerza política de Modi tiene una presencia limitada en el valle de Cachemira, pero sigue teniendo cierta fuerza en la división regional de Jammu.
La Cachemira india es escenario de una rebelión armada de corte separatista que pide la independencia del territorio o su adhesión a Pakistán y ha provocado la muerte de miles de personas, en su mayoría civiles. La región es disputada además por la India y el vecino Pakistán desde su independencia del imperio británico en 1947.