Estas fuentes destacaron que no existe ningún vínculo entre ese plan iraní y el intento de asesinato de Trump, ocurrido el sábado en un mitin en Butler (Pensilvania), cuando un joven de 20 años disparó contra el expresidente, hiriéndolo en una oreja y matando a uno de los asistentes al acto.
A pesar de que no hay ninguna relación aparente, en el momento del atentado del sábado el Servicio Secreto había reforzado la seguridad del exmandatario debido precisamente a esas amenazas de Irán, detallaron esas fuentes.