"Dado que en territorio de Bielorrusia se encuentran desplegadas armas nucleares no estratégicas, nosotros propusimos en esta ocasión a nuestro amigos y aliados (...) participar en una de las fases de estos ejercicios", dijo Putin, según la agencia RIA Nóvosti.
Precisó que las fuerzas bielorrusas, que recibieron las armas nucleares tácticas rusas después del inicio de la guerra en Ucrania, se sumarán a las maniobras en su tercera fase.
"Las correspondientes órdenes ya fueron impartidas al Ministerio de Defensa y al Estado Mayor General", resaltó.
Este martes las Fuerzas Armadas de Bielorrusia iniciaron una inspección sorpresa de las fuerzas nucleares tácticas por orden del presidente, Alexandr Lukashenko.
El ministro Defensa bielorruso, Víctor Jrenin precisó que los ejercicios revisarían la disposición combativa de una división de sistemas de misiles tácticos Iskander y una escuadrón de aviones Su-25, capaces de portar armas nucleares tácticas.
"La inspección tiene un carácter exclusivamente defensivo", subrayó Lukashenko.
Putin ordenó el lunes las maniobras con misiles en el Distrito Militar Sur, que incluye las cuatro regiones ucranianas anexionadas por Moscú en 2022.
El Ejército ruso se propone "garantizar de manera incondicional la integridad territorial y la soberanía del Estado ruso en respuesta a las declaraciones provocadoras y las amenazas vertidas por ciertos dirigentes occidentales contra la Federación Rusa", informó el Ministerio de Defensa ruso en un comunicado.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, aseguró el lunes en su rueda de prensa telefónica diaria que los ejercicios son una respuesta a las afirmaciones del presidente francés, Emmanuel Macron, y de otros altos responsables británicos.
"Ellos hablaron sobre la disposición e incluso intención de enviar contingentes militares a Ucrania, es decir, poner a los soldados de la OTAN frente a los militares rusos. Esa es una nueva espiral de escalada de la tensión. No tiene precedentes y exige una especial atención y medidas especiales", dijo.
Varios altos funcionarios rusos han sugerido el posible uso de armas nucleares tácticas en territorio ucraniano, al tiempo que se han opuesto al posible emplazamiento de dicho tipo de armamento por parte de EEUU en el Reino Unido.