"Hay que dirigir la industria de armamento europea en dirección a Ucrania", dijo el presidente francés después de un encuentro con el primer ministro checo, Petr Fiala, con el que coincidió en la necesidad de invertir más en el sector de defensa.
La Comisión Europea propuso hoy impulsar con al menos 1.500 millones de euros la industria militar europea, para aumentar la producción mediante compras conjuntas o ventajas fiscales, ante la inseguridad creada principalmente por el ataque ruso a Ucrania.
Macron mencionó su papel al frente de una coalición formada por 23 países, entre ellos España, que en enero decidió unir fuerzas para suministrar munición a Kiev.
A esta iniciativa se suma ahora la checa, con la que París colabora y que quiere conseguir excedentes de munición de países fuera de la UE, en concreto 500.000 unidades de munición de artillería con calibre estándar de la OTAN y 300.000 unidades de calibre soviético.
Macron resumió también la agresión rusa como un proceso que empezó hace diez años, con la anexión ilegal de la península de Crimea, y que en febrero de 2022 se intensificó con la invasión a gran escala.
El líder francés aseguró el apoyo a Kiev "tanto tiempo como sea necesario para que Rusia no venza" y lo hizo en un país, la República Checa, al que calificó de "socio fiable", y que forma parte de la UE y la OTAN tras haber salido de la esfera de influencia de Moscú en 1989.
El primer ministro checo calificó como muy importante la cumbre convocada por Macron en París la semana pasada porque, dijo, "fija objetivos claros y los pasos a dar".