La mayoría de las pateras se dirigían a las provincias peninsulares de Murcia, Alicante, Almería y Granada, además de a la isla de Formentera, en el archipiélago de Baleares.
En el caso de Murcia, las embarcaciones empleadas por los inmigrantes se conocen como "pateras taxi", que cubren rutas rápidas desde el norte de África hasta la costa del sureste español, por lo que está en proceso de investigación policial la identificación de los patrones.
Los últimos datos facilitados por el Ministerio español del Interior muestran la caída de la entrada de inmigrantes en el archipiélago atlántico de Canarias por vía marítima y el aumento en las últimas semanas de la llegada a las costas peninsulares y las islas Baleares.
Según el último informe, con fecha del 15 de julio, las llegadas por mar al territorio peninsular de España y las Baleares subieron un 46,7 % desde enero respecto al mismo periodo de 2022, y descendieron un 18,5 % en el caso de Canarias.
Desde el 1 de enero, el número de inmigrantes que consiguieron entrar en España por vía marítima subió un 1 %, con 13.487 entradas.
Respecto a las llegadas por vía marítima a la península y Baleares, alcanzaron los 5.781 inmigrantes; desde Canarias, sumaron 7.590.