De esta manera quisieron hacer visible simbólicamente "la fatal política fósil" de este partido, socio de la coalición de gobierno liderada por los socialdemócratas e integrada asimismo por los verdes, según un comunicado.
Además de verter crudo artificial biodegradable contra la sede del FDP, del que afirman que es la principal formación a la hora de bloquear medidas de protección del clima en la actual legislatura, colocaron pancartas a la entrada con el mensaje "¡Aquí se destruye nuestra subsistencia!".
La protesta se extendió asimismo a sedes de empresas de energías fósiles, como Shell, Bayer y Vattenfall, y asociaciones de grupos de presión.
Así, en una treintena de puntos, activistas de Extinction Rebellion y científicos de Scientist Rebellion "llamaron la atención sobre la destrucción de nuestras formas de subsistencia" con pancartas en las que se podía leer "Beneficios por encima de vidas".
La activista Christina Alt, estudiante de ecología, evolución y conservación de la naturaleza y activista de "Letzte Generation", denunció que "mientras se debate sobre cuánto tiempo ducharse, unos pocos superricos y consorcios son responsables de la absoluta mayoría de las emisiones".
"En tanto, partidos como el FDP nos responsabilizan a nosotros, ciudadanos de a pie, de la falta de protección del clima y nos distraen del hecho de que son ellos los que bloquean políticamente todos los intentos", afirmó.
Por su parte, Amelie Meyer, de Extinction Rebellión, aseguró que "gran parte de la sociedad está dispuesta a cambios para detener este actual camino mortal".
"Juntos hacemos visible quién está implicado en la destrucción de nuestros medios de subsistencia" agregó.
Los activistas de Extinction Rebellion instalaron ayer un campamento de protesta en el barrio gubernamental y anunciaron diversas actividades y acciones creativas hasta el próximo lunes a la que todos están invitados para "defender soluciones positivas y pronunciarse en contra de la explotación medioambiental", según Meyer.
El comunicado de "Letzte Generation" recuerda, además, que a partir del miércoles 19 de abril, "personas de toda Alemania partirán hacia Berlín para oponer resistencia civil pacífica al destructivo rumbo en materia de combustibles fósiles del gobierno" con la intención de paralizar por completo la capital alemana.
Por otra parte, la Fiscalía de Berlín no ve responsabilidad penal para dos activistas climáticos, tampoco por negligencia, en relación con la muerte de una ciclista el pasado 31 de octubre al chocar contra una hormigonera y el retraso de los equipos de rescate al lugar del accidente por un bloqueo de calles en el marco de una protesta medioambiental.
Según la investigación, el bloqueo de las vías efectivamente provocó un retraso de tres minutos para el vehículo de mando y de ocho minutos para el de rescate, pero llegar antes al lugar no habría cambiado la situación para la ciclista, pues debido a las graves lesiones, no habría sido posible salvar la vida de la ciclista, reveló la autopsia.
Ambos activistas han sido acusados de coacción y resistencia a la autoridad, pero no de un delito de lesiones físicas ni de homicidio.