La brigada -creada en 2022, con apoyo popular y que junta en gran medida a jóvenes que no obedecen a milicias tradicionales- confirmó la ejecución del joven Zuhair Galith en su grupo de Telegram, donde difundió un vídeo en el que se ve al supuesto colaborador confesar su espionaje antes de ser ejecutado.
Este, residente en la Ciudad Vieja de Nablus -zona donde Guarida de los Leones se hizo fuerte el último año- habría trabajado para la Inteligencia de Israel y dio información de miembros destacados del grupo que las fuerzas israelíes mataron en varias emboscadas.
Según cuenta en el vídeo, habría proporcionado detalles sobre la ubicación de milicianos palestinos que se escondían del Ejército israelí, y la Inteligencia le habría pedido que los identificara antes de incursiones militares en que acabaron muriendo.
A su vez, Galith aseguró que Israel le pagó 500 shéqueles (unos 126 euros) y cigarros por sus servicios, y que los Servicios de Inteligencia le chantajearon y amenazaron con revelar su condición de homosexual si no colaboraba.
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Poco después, su cadáver apareció en medio de las calles de la Ciudad Vieja de Nablus. Se convirtió a su vez en la primera persona asesinada por los propios palestinos por acusaciones de colaborar con Israel, algo que no sucedía en Cisjordania desde hace dos décadas.
Hamás ejecutó a presuntos colaboradores de Israel
En la Franja de Gaza, el grupo islamista Hamás sí condenó a muerte y ejecutó a presuntos colaboradores con Israel estos últimos años.
Según el periódico israelí Haaretz, que cita a un habitante de Nablus, Galith era de una familia humilde de bajos ingresos, y se sintió presionado a colaborar por una grabación en la que supuestamente tenía relaciones sexuales con otro hombre.
De acuerdo con esta fuente, esta "es una práctica muy conocida" que usa Israel "para aprovecharse de familias pobres o hombres homosexuales", mal vistos por parte de la sociedad palestina, aún muy conservadora y tradicionalista en este ámbito.
Israel se hizo con el control de Jerusalén Este y Cisjordania en 1967, y desde entonces mantiene una ocupación y colonización de estos territorios que es de las más largas en la historia reciente.
En el último año, las tensiones, choques y fricciones armadas han ido mucho en aumento en distintos puntos de Cisjordania, y también se han incrementando los ataques cometidos por palestinos, así como las agresiones violentas por parte de colonos israelíes.
Los primeros meses de este año han sido los más violentos del conflicto palestino-israelí desde el 2000. Hasta ahora, desde inicios de 2023, han muerto 93 palestinos y árabes-israelíes en incidentes violentos de distinta índole y también 18 personas del lado israelí.
A ello se junta el surgimiento de nuevas milicias como Guarida de los Leones en Nablus o las Brigadas de Yenín.
Ambas actúan en estas dos ciudades del norte de Cisjordania -bastiones de la resistencia armada contra Israel- y lo hacen de forma independiente, sin estar bajo control directo de facciones políticas clásicas e incluso enfrentándose a la Autoridad Nacional Palestina, cada vez más deslegitimada entre su propia población.