“Se informa que, en el día de la fecha, se realizó al señor presidente de la Nación, Alberto Ángel Fernández, un bloqueo radicular, debido a una hernia de disco lumbar”, indicó la Unidad Médica Presidencial en un parte difundido por el Gobierno argentino.
Tras ser sometido a ese procedimiento médico, el jefe de Estado, de 63 años, regresó a la residencia de la Quinta de Olivos, en la periferia norte de Buenos Aires, “donde continuará con los controles correspondientes”, añade el parte médico.
El martes pasado Fernández fue trasladado al sanatorio Otamendi, una clínica privada del barrio capitalino de Recoleta, por presentar “un cuadro de dolor lumbar agudo” y se le efectuaron estudios que evidenciaron una hernia de disco lumbar.
Cuando todavía era candidato a presidente, en junio de 2019, Alberto Fernández debió ser ingresado en un hospital por una tromboembolia pulmonar.
Además, en noviembre del año pasado, durante la cumbre del G20 celebrada en Bali (Indonesia), el mandatario se descompensó y sufrió un desmayo que, más tarde, fue diagnosticado como una gastritis erosiva con signos de sangrado.
Después del tratamiento médico, reanudó sus actividades normalmente.