"Esperamos, confiamos en que la operación rusa para lograr todos los objetivos previstos conducirá a que Occidente deje (...) de intentar promover el mundo unipolar dominado por Estados Unidos y sus aliados", afirmó durante una rueda de prensa conjunta con su homólogo omaní, Badr Al Busaidi.
Además, expresó su esperanza de que Occidente deje de "socavar el derecho internacional, ignorar y violar los estatutos de la ONU, incluyendo el principio de igualdad soberana de los Estados".
Lavrov reiteró que los objetivos de la operación bélica en Ucrania "radican ante todo en la protección de los habitantes de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk del régimen neonazi de Kiev y garantizar que Occidente no utilice el territorio de Ucrania para generar amenazas militares a la seguridad de Rusia".
Respecto al papel de la ONU en la actual crisis, el jefe de la diplomacia rusa recordó la reciente visita del secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, a Rusia.
"Teniendo en cuenta el interés expresado por António Guterres, le aconsejamos ante todo dirigir sus llamamientos a las autoridades de Kiev, exigirles que no obstaculicen la salida de la población civil de la zona de la operación militar", indicó.
Según Lavrov, actualmente hay un representante de la secretaría general de la ONU en Ucrania, que busca "ayudar en la solución de los asuntos planteados por nosotros".
Insistió en que Rusia "continúa abriendo corredores humanitarios, por los que continúa saliendo la gente".
"Estamos interesados en que todos los civiles abandonen estas zonas", afirmó.
No obstante, también se expresó de modo crítico en contra de la secretaría general de la ONU, ya que "perdió la oportunidad de lograr una solución política, cuando durante 7 largos años no reaccionaron al sabotaje evidente y claro de la resolución del Consejo de Seguridad 2202 por parte del régimen de Kiev".
Dicha resolución, recordó, ratificó los Acuerdos de paz de Minsk para el Donbás que preveían la solución política del conflicto en el este de Ucrania.
Por su parte, el jefe de la diplomacia omaní, afirmó que su país "observa con dolor en el corazón lo que sucede" en Ucrania.
"La escalada de las tensiones amenaza con el surgimiento de situaciones alarmantes para todo el mundo. Partimos de que es necesario impedir el desarrollo de acontecimientos de este tipo. Llamamos a todas las partes a atenerse a las vías de una solución pacífica por medio del diálogo", señaló.