"No es posible una seguridad en Europa sin la seguridad de Ucrania", afirmó Borrell en una rueda de prensa a pocos kilómetros de la línea de separación entre las fuerzas ucranianas y las milicias separatistas prorrusas enfrentadas desde 2014.
El representante de la diplomacia europea aseguró que "cualquier debate sobre la seguridad europea debe incluir a la UE y Ucrania".
Borrell advirtió de que el conflicto en la frontera entre Rusia y Ucrania "está a punto de agravarse y las tensiones se han ido acumulando".
"Rusia ha estado concentrando tropas y equipamiento de un modo muy inusual. Eso sucedió muy rápido", constató, al señalar que la UE, Estados Unidos y la OTAN trabajan en una respuesta conjunta en caso de que Moscú opte por la invasión a Ucrania.
"Nuestra principal preocupación es reducir las tensiones por medio de negociaciones y con nuestra firme posición de apoyo a Ucrania. Cualquier agresión militar contra Ucrania tendrá graves consecuencias", alertó.
Por su parte, el ministro Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, dijo que la visita de Borrell a Donbás es histórica porque "se ha convertido en el primer alto representante de la UE para la política exterior en visitar la zona del conflicto" entre Ucrania y Rusia.