Los ecologistas justificaron su decisión por el hecho de que la mayoría parlamentaria había forzado al Ejecutivo rojiverde a gobernar con los presupuestos de la oposición, aunque reiteraron que siguen apoyando a Andersson, primera mujer en gobernar Suecia, en una hipotética nueva votación.
"De acuerdo con la práctica constitucional, un Gobierno de coalición debe dimitir cuando sale un partido. No quiero dirigir un Gobierno del que se cuestione su legitimidad. Por eso he presentado mi dimisión", dijo en rueda de prensa Andersson, que reiteró su disposición a liderar un Ejecutivo socialdemócrata en minoría.