Israel vivía este jueves una escalada de violencia en dos frentes, con la intensificación de los bombardeos en la Franja de Gaza y los disturbios en las ciudades judeo-árabes en su territorio.
Poco después de medianoche, las alertas de cohetes se activaron en el sur del país, pero también en la metrópoli de Tel Aviv, por primera vez desde el inicio de la escalada el lunes, así como en el norte.
Un portavoz de Hamás anunció el lanzamiento y pidió a las “aerolíneas internacionales que suspendan inmediatamente todos sus vuelos” con destino Israel.
Desde el pasado lunes, Hamás ha disparado más de 1.600 cohetes en dirección a Israel y el ejército israelí ha bombardeado Gaza más de 600 veces, según fuentes militares.
La autoridad de aviación civil de Israel había comunicado que el desvío de todos los vuelos con destino al aeropuerto internacional Ben Gurión de Tel Aviv hacia el aeródromo de Ramon.
Varias compañías aéreas ya anunciaron que cancelaban vuelos a Israel.
Los portavoces de United Airlines y American Airlines dijeron que sus vuelos de Estados Unidos a Israel habían sido cancelados “hasta el 15 de mayo”.