Papa insta a combatir con “política de fraternidad” el auge del populismo

CIUDAD DEL VATICANO. El papa Francisco recomendó “una política de fraternidad, arraigada en la vida del pueblo” para responder “al auge del populismo” y sin más “individualismo”, en un saludo grabado para una conferencia internacional en Londres que tratará cuestiones acerca de su libro, “Soñemos juntos”.

El papa Francisco (i) celebra una misa en el Basílica de San Pedro. (EFE)
audima

“Uno de los objetivos de vuestra reunión es mostrar que la verdadera respuesta al auge del populismo no es precisamente más individualismo sino lo contrario: una política de fraternidad, arraigada en la vida del pueblo”, expresó el papa en su mensaje a este acto, organizado por el Centro de la Teología y la Comunidad.

Francisco destacó que esta manera de afrontar el populismo “trata de encontrar mecanismos para garantizar a todas las personas una vida digna de llamarse humana”.

El pontífice argentino se refirió a “la Política con mayúscula”, entendida como un “servicio que abre nuevos caminos para que el pueblo se organice y se exprese”.

“Es una política no sólo para el pueblo sino con el pueblo, arraigada en sus comunidades y en sus valores. En cambio, los populismos más bien siguen como inspiración, consciente o inconsciente, otro lema: ‘Todo para el pueblo, nada con el pueblo’, paternalismo político”, reivindicó.

Criticó las políticas populistas y aseguró que “el pueblo en la visión populista no es protagonista de su destino, sino termina siendo deudor de una ideología”.

Defendió que “cuando el pueblo está descartado, se le priva no sólo del bienestar material sino de la dignidad de actuar”, por lo que “para la Iglesia es imposible separar la promoción de la justicia social del reconocimiento de los valores y la cultura del pueblo”.

“Por eso en ‘Soñemos juntos’ hablo de un deseo: que todas las diócesis del mundo tengan una colaboración sostenida con los movimientos populares”, reclamó.

Finalmente, expresó que “el desprecio a la cultura popular es el comienzo del abuso de poder” y recordó que “respetar al pueblo es respetar sus instituciones, incluso las religiosas”.

“Es imprescindible que las comunidades de fe se encuentren, fraternicen, para trabajar ‘para y con el pueblo’. Con mi hermano el Gran Imán Ahmad Al-Tayyeb ‘asumimos’ la cultura del diálogo como camino, la colaboración común como conducta; y el conocimiento recíproco como método y criterio. Siempre al servicio de los pueblos”, aseveró el papa Francisco.

Lo
más leído
del día