La ex primera dama dijo en la noche del lunes que Trump es el presidente “equivocado” para el país y lo describió como un líder divisivo con una absoluta “falta de empatía”, que no ha estado a la altura del reto de la pandemia y la crisis económica asociada.
Trump esperó hasta la mañana del martes para responder, lanzándose contra su predecesor Barack Obama y contra Biden, que fue su vicepresidente.
"Por favor que alguien le explique a @MichelleObama que Donald J. Trump no estaría aquí en la bella Casa Blanca, si no fuera por el trabajo hecho por su esposo, Barack Obama", apuntó el mandatario.
Trump -que se vanaglorió de la fortaleza de la economía con índices de desempleo muy bajos hasta el golpe del coronavirus - reiteró que la situación está mejorando rápidamente.
"Mi gobierno y yo creamos la mejor economía de la historia de cualquier país", aseguró el mandatario, pese a que Estados Unidos es el país del mundo más enlutado por el coronavirus, con más de 170.000 fallecidos, y el desempleo está por encima de 10%.
El mandatario afirmó que la economía se está levantando, que los empleos abundan e hizo referencia a que el indicador tecnológico de la bolsa, el Nasdaq, tocó niveles récords. ”Todo el resto ya va a llegar”, afirmó Trump.
El expresidente Barack Obama va a hablar el miércoles en la tercera noche de la convención para cimentar la nominación de Biden, que aventaja a Trump en las encuestas para la elección del 3 de noviembre.
Palabra de Michelle
"Siempre que buscamos en esta Casa Blanca algún liderazgo, consuelo o alguna apariencia de estabilidad, lo que obtenemos en cambio es caos, división y una falta total y absoluta de empatía", dijo la esposa del expresidente Barack Obama, en una crítica sin precedentes a un mandatario en funciones.
"Trump es el presidente equivocado para nuestro país", enfatizó en un mensaje grabado en video.
Michelle Obama cerró la primera jornada de un cónclave en formato virtual instalado hasta el 20 de agosto en Milwaukee, Wisconsin, un estado clave que Trump ganó sorpresivamente en 2016 con poca ventaja.
En un Estados Unidos que llora más de 170.000 muertos por el coronavirus, golpeado por una histórica recesión económica y una oleada de ira contra el racismo, Trump tuvo el “tiempo más que suficiente para demostrar que puede hacer el trabajo, pero claramente lo supera”, dijo. ”Es lo que es”, afirmó, usando la misma frase de resignación de Trump al referirse a la pandemia.
La abogada de Chicago, que ha inspirado a muchos con su autobiografía best seller “Mi historia”, hizo una encendida defensa de la urgencia de votar y “a hacer cola toda la noche si es necesario”. La palabra “Voten” podía leerse en la cadena dorada que llevaba al cuello.
"Joe no es perfecto", dijo sobre Biden, ocho años vicepresidente de su marido. Pero "sabe lo que se necesita para rescatar una economía, hacer frente a una pandemia y liderar nuestro país. Y escucha. Dirá la verdad y confiará en la ciencia", aseguró.
Michelle Obama puso toda su popularidad para buscar derrotar a Trump, que confirmó que aceptará formalmente la nominación del Partido Republicano la próxima semana, “en vivo, desde la Casa Blanca”.