Pero si segregamos el número de muertos por cada región socioeconómica y cultural del mundo nos encontramos que el panorama nos ofrece resultados dispares, siendo Europa Occidental y América del Norte (Estados Unidos y Canadá) las más afectadas, mientras que Oceanía y el Caribe angloneerlandés (sin contar República Dominicana, Cuba, Haití y Puerto Rico, cuyas cifras aparecen englobadas dentro de América Latina) apenas sufren embates de la pandemia.
América Latina reportó hasta el momento un total de 40.559 fallecidos, lo que representa el 11,70 por ciento del total de decesos por COVID-19 en el mundo. Se destacan Brasil con 22.965 muertos (es decir, el 56,62 del total de la región), seguido de México con 7.394 , Perú con 3.629 y Ecuador con 3.203.
Con estas estadísticas, América Latina aparece como la tercera región de mayor expansión de la enfermedad, detrás de Europa Occidental, que representa el 46,04 por ciento de los decesos, y América del Norte, con 30,62.
Se estanca en Asia
Un dato llamativo es que la región de Asia Central y Oriental, que incluye China, país origen de la enfermedad, apenas reportó desde finales de 2019 hasta hoy un total de 13.452 decesos. Esto representa el 3,90 del total de fallecidos en el planeta. Se destaca también la expansión de la enfermedad en la India, que ya superó al gigante asiático como el país con más muertos y contagiados en la región.
En el Medio Oriente y África del Norte, cuyo porcentaje es de 4,33 del total de muertos, los reportes más resaltantes afectan a Turquía e Irán. Mientras que en Europa Oriental (3,65) es Rusia el que presenta el mayor índice de casos.
Finalmente, las regiones del mundo menos afectadas son África Subsahariana (075), Oceanía (0,04) y el Caribe (003).