El comisario general inspector Feliciano Martínez Peña, director de la Policía Nacional en Alto Paraná, informó que durante el operativo se incautaron 50 aparatos celulares, una gran cantidad de armas blancas, así como refinados whiskies y vinos.
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Lo que llamó la atención de los intervinientes fue el hallazgo de tres palas, lanzas y sogas, elementos que se presume serían utilizados por los internos para ejecutar la fuga masiva. Según las sospechas, el plan estaba siendo gestado en el pabellón destinado a los miembros de la facción criminal brasileña Primer Comando Capital (PCC).
En esta ocasión, se encontraron también tambores y baldes que eran utilizados para la elaboración de “chicha”, una bebida fermentada de fabricación casera. Según el alto jefe policial, la bebida sería distribuida entre la población penal para hacer un amotinamiento y ejecutar el plan de fuga masiva, aprovechando las fiestas de fin de año.
Martínez contó que, durante el operativo, los internos del pabellón del PCC intentaron resistirse, pero fueron reducidos por un contingente de 300 agentes policiales, incluidos a tres pelotones de la FOPE que llegaron de Asunción.
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Habría complicidad de agentes penitenciarios
El agente fiscal Manuel Rojas Rodríguez, titular de la Unidad Especializada en la Lucha contra el Narcotráfico N.º 2 de Alto Paraná, adelantó que abrirá una investigación para tratar de identificar a los responsables del ingreso de sustancias prohibidas al penal. También coincidió con el director de la penitenciaría sobre la posible complicidad de los guardiacárceles, pues en la cárcel la venta de drogas es “cinco a diez veces más rentables que afuera”.