Los imputados son Marcelino González (56), Sulma Rigoberta González (57) y Antonia Vidalina González (60), quienes enfrentan cargos por violación del deber de cuidado de ancianos o discapacitados e incumplimiento del deber legal alimentario.
La situación fue descubierta en una vivienda ubicada en el kilómetro 5,5 Monday del barrio San Miguel de Presidente Franco, donde la madre, Margarita González, quien padece de tres enfermedades, vivía en condiciones de abandono, incapaz de moverse por sí misma.
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El caso fue denunciado por vecinos que notaron la situación precaria de la anciana. Tras recibir la denuncia, la Fiscalía y la Policía realizaron una inspección en el lugar y encontraron a Margarita sin recibir la atención y ni el cuidado de ningún familiar.
Además, se constató que la única hija que la cuidaba, Alba Rosa González, también estaba imposibilitada de asistirla debido a que también padece de una enfermedad.
Acuerdo de asistencia
En la investigación se reveló que pese a existir un acuerdo en la Defensoría Pública para la prestación alimentaria, los hermanos no cumplieron con sus obligaciones.
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Marcelino González se había comprometido a ayudar con 500.000 guaraníes mensuales, mientras que Antonia Vidalina y Sulma Rigoberta debían aportar 300.000 guaraníes cada una al mes, sumas que debían ser entregadas a Alba Rosa, pero nunca lo hicieron, según el reporte del Ministerio Público.
La fiscala Viviana Sánchez, al reunir varios elementos de sospecha contra los tres hermanos, procedió a imputarlos, quedando a disposición del Juzgado de Garantías.