La denuncia fue presentada ayer en la Subcomisaría 4ª por una joven de 20 años, madre del niño, quien aparentemente se encontraba en estado de ebriedad. La joven explicó que se había recostado a descansar a la 13:00 con sus tres hijos: de 7 meses, de 3 y de 2 años. Al despertar una hora más tarde, notó la ausencia del niño de 2 años y comenzó a buscarlo desesperadamente por el vecindario.
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Al no encontrarlo, se presentó poco antes de las 20:00 en la dependencia policial para denunciar la desaparición y el caso fue informado al personal de la División Búsqueda y Localización.
Encontraron el cuerpo en un pozo
Posteriormente, agentes de la división especializada se constituyeron en la casa del menor a fin de recabar mayores datos y, tras una búsqueda por la zona, se percataron de que había un pozo semiabierto en la casa del vecino.
A las 22:00, pidieron ayuda al Cuerpo de Bomberos Voluntarios para inspeccionar el pozo de 6 metros de profundidad. Lamentablemente, confirmaron el trágico desenlace al hallar el cuerpo sin vida del niño.
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El hecho fue informado a la agente fiscal de turno, Carolina Rosa Gadea, quien llegó al lugar junto con el médico forense Carlos Alfaro, quien diagnosticó como causa de muerte “asfixia mecánica por inmersión”.