El fiscal Humberto Rosetti tiene un largo historial de denuncias en su contra. Es sindicado de comandar una rosca de recaudadores ilegales junto a un grupo de abogado de la zona, según reiteradas denuncias del Colegio de Abogados del Alto Paraná.
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El mismo primeramente se había desempeñado como fiscal en diversas unidades, principalmente en las codiciadas unidades de marca de Ciudad del Este y en el 2020 fue designado fiscal adjunto de Alto Paraná, pese a ser el peor puntuado. Contaba con el apoyo de la ahora ex fiscal general, Sandra Quiñonez.
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En su prontuario figura un apercibimiento por mal desempeño de funciones por el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM), siendo agente fiscal de la Unidad Penal N° 12 de la Región II de Alto Paraná, según la SD N° 16 del 29 de junio de 2011.
Además había sido denunciado por enriquecimiento ilícito, pues tiene una lujosa vivienda en el exclusivo Paraná Country Club, vehículos de alta gama y otros bienes difíciles de justificar, según su función como fiscal.
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Con la asunción de Rolón, Rosetti fue enviado para cumplir funciones en los departamentos de Caazapá y Guairá y en su reemplazo fue designado Jorge Arsenio Sosa García, según la resolución N° 1556, con fecha de hoy en la que se dispone una movida general de fiscales adjuntos.