La nueva sede de la Penitenciaría de Alto Paraná está ubicada en el distrito de Minga Guazú, a unos 3.000 metros de la ruta, lado Acaray. La obra se inició en agosto del 2019 y debió terminar en 24 meses, siendo adjudicada a la empresa AGB TOCSA, pero hasta la fecha no fue entregada.
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El contrato de adjudicación fue modificado varias veces por lo que la fecha de entrega de la obra sufrió cambios. Actualmente la enorme infraestructura está tomada por yuyales y no hay movimiento de trabajadores en el sitio, por lo que proyecta un aspecto de abandono.
El monto de la adjudicación también sufrió variaciones, originalmente era de G. 67.799.082.348 ,pero mediante un convenio modificatorio se dispuso un incremento de G. 13.419.041.204, lo que representa un aumento de 19.79%, y el presupuesto trepó a G. 81.218.123.552.
Una de las principales trabas de esta millonaria inversión es la falta de fuente de agua para consumo, pues está asentada en una zona del distrito de Minga Guazú donde el agua es salada. Según los datos, se hicieron varias excavaciones pero en todos los casos el agua no era apta para el consumo.
Vecinos del penal de CDE, cansados de la insalubridad e inseguridad
Las obras compensatorias que en su momento se prometió a los vecinos tampoco fueron ejecutadas. El acceso es un angosto camino de tierra que se vuelve intransitable en días de lluvia.
El nuevo penal debe albergar a 1.318 personas privadas de libertad (PPL), entre condenados y prevenidos que actualmente están amontonados en la Penitenciaría Regional de Ciudad del Este. Este penal había sido habilitado para 400 internos, pero en la actualidad alberga más del triple de su capacidad.
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El penal de Ciudad del Este carece de condiciones adecuadas, pues muchas celdas se fueron improvisando debido a la superpoblación. Además está en una zona residencial, en medio de locales gastronómicos e instituciones educativas, lo que genera quejas frecuentes de los vecinos por la peligrosidad e insalubridad que se genera.
Una sede de máxima seguridad
El nuevo complejo penitenciario de Minga Guazú tendrá una capacidad para 1.650 personas, donde se prevé la implementación de tecnología para el sistema de control y monitoreo para asegurar la seguridad.
Las celdas, pabellones y diversas áreas de servicios fueron construidos conforme a estándares de alta seguridad. Mediante esto se podrá implementar programas de ocio cero, con educación formal, técnica, recreativa y cultural de los internos.