Itakyry: detienen a Mbururu y dictan orden de captura contra presuntos cabecillas

HERNANDARIAS. El fiscal Alfredo Acosta Heyn dictó orden de captura contra los supuestos cabecillas del ataque criminal a una familia en Itakyry, en el marco de un conflicto de tierras en la zona. Se trata de dos integrantes de la comunidad indígena Ka’a Poty y el intigador alias Mbururu, quienes fueron plenamente reconocidos por las víctimas.

La familia fue atacada por un grupo de personas con armas blancas.
audima

El Ministerio Público tomó intervención en la denuncia del brutal ataque contra la familia Torras, ocurrido ayer en la colonia Tape Yke. La denuncia radicada por supuesto hecho punible por tentativa de homicidio, robo agravado en banda, tentativa de coacción sexual, producción de riesgos comunes y otros recayó en la unidad del fiscal Alfredo Acosta Heyn, quien inició con las primeras diligencias investigativas.

En ese contexto, el fiscal dictó una orden de captura contra tres de los supuestos cabecillas identificados como los hermanos Diego Gonçalves Díaz (27) y Lorena Guisela Gonçalves Díaz (27), además de Rafael Esquivel (47) alias Mbururu. Éste último fue detenido en el transcurso de esta tarde, sobre la avenida Perú, en Ciudad del Este, por agentes de Investigación de Delitos.

Una turba de aproximadamente 50 personas munidas con todo tipo de armas blancas, palos de madera, varillas de hierros y honditas irrumpió ayer, en horas de la siesta, en un establecimiento agrícola propiedad de la familia Torras. El grupo agredió físicamente al propietario Pedro Torras y su hermano Carlos Torras, quemaron maquinarias agrícolas, destruyeron todos los enseres y electrodomésticos de la casa, mataron animales y robaron pertenencias.

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Además amenazaron a la familia a que abandonen la propiedad o caso contrario volverían a quemar la casa y también dijeron que abusarían de las mujeres de ese núcleo, según la denuncia.

Las víctimas cuentan con imágenes de circuitos cerrado de la propiedad que muestran el momento del ataque y cómo actuó el grupo, que según la denuncia son miembros de la comunidad indígena Ka’a Poty, que reclama esas tierras.

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