El balneario irregular denominado “Costanera Pira’i” está ubicado en el barrio Acaray, a 600 metros de la avenida Perú de Ciudad del Este, en la costa del lago que lleva el mismo nombre.
Su explotación como lugar de veraneo es motivo de conflicto desde 2015, cuando varias familias invadieron una manzana que supuestamente debía ser destinada a una plaza.
Uno de los ocupantes es el dirigente social Rafael Esquivel, quien se autodenomina miembro de la comisión de la Costanera Pira’i.
Desde el inicio la explotación del lugar se registraron varios conflictos con los vecinos de la zona debido a dudas sobre los límites de los inmuebles que lindan con la franja de protección del lago Acaray. En reiteradas ocasiones hubo incidentes, amenazas y denuncias entre ambas partes.
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En los últimos meses, la concurrencia en el lugar aumentó considerablemente y supuestamente se cobra entrada. Igualmente se colocó una cantina, según reconoció Esquivel, quien además justificó el pago poe el ingreso señalando que se contrata a artistas locales para shows en el sitio.
La Municipalidad de Ciudad del Este confirmó que el lugar no está habilitado para su explotación como balneario.
La situación más preocupante es la conexión eléctrica precaria que se colocó en el lugar, utilizando el cercado de los vecinos para colgar el tendido eléctrico.
Además los visitantes del balneario hacen fogatas, y los vecinos denunciaron que incluso hacen quema de basura, lo que representa un peligro de incendio ya que balneario está bordeado por un bosque.
Igualmente, los vecinos denunciaron que se desvió un cauce hídrico con el uso de tractores en horas de la noche.
Otra preocupación es la deforestación de la reserva de bosque, pues constantemente se escuchan ruidos de motosierra en el lugar. Al respecto, Esquivel alegó que solo se cortaron árboles ya caídos y se cargaron escombros en la zona del arroyo para facilitar el acceso.
Este lunes, una comitiva de funcionarios municipales verificaron el sitio.
Haidé Espínola, una de las funcionarias municipales intervinientes, dijo que se colocaron divisorias en las costas por motivos desconocidos. Además, confirmó la tala de árboles y la quema de basura.
Todos los antecedentes fueron remitidos al juzgado de faltas municipales.
Hostigamiento a vecinos
Vecinos del balneario son constantemente hostigados, según denunciaron.
En los últimos días, cámaras de seguridad captaron a personas arrojando piedras hacia sus casas y un vehículo derribó uno de los portones.
Durante el fin de semana todo el acceso permaneció obstruido por vehículos y los vecinos no pudieron entrar ni salir de sus casas.