La disposición municipal fue cumplida por una comitiva de funcionarios municipales bajo la dirección del jefe de la División de Fiscalización, Carlos Cantero. Los funcionarios constataron que el local no contaba con la habilitación para ofrecer los servicios de tienda shop y barbería, que debía obtener de la Comuna local.
Aglomeración, peleas callejeras y descontrol en avenida gastronómica
La Municipalidad local había convertido varias avenidas de la ciudad en peatonal con el propósito de reactivar el sector gastronómico, pero respetando las medidas sanitarias dispuestas por el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social.
El primer fin de semana la propuesta resultó un éxito, pero el sábado último se realizó una fiesta frente al local “El Mariscal”, ocasionando quejas de los vecinos por aglomeración, polución sonora y desorden en la vía pública.