El 3 de diciembre pasado, la abogada Gilda Portilla, defensora del intendente, había solicitado a la jueza el abandono de la querella, al alegar que el accionista ni su abogado se presentaron a la hora convocada para el inicio del juicio oral.
Si bien previamente la magistrada dispuso la postergación de la diligencia para este 10 de diciembre por sobrecarga de actividades, la decisión no fue notificada a las partes. Por esa razón, según la abogada defensora, la suspensión no tenía efecto para las partes.
La jueza Recalde trasladó el planteamiento de la defensa al querellante para presentar su postura respecto al pedido de su contraparte. De esta manera, la convocatoria fijada para mañana para el inicio del juicio oral quedó suspendida, hasta tanto se resuelva el incidente del intendente.
Según los antecedentes, Villasanti había accionado judicialmente contra el intendente por calificarlo de “mafioso”. Además, pidió una condena contra el jefe comunal de US$ 2.500.000 como parte de una compensación por “daño a la reputación”.
Villasanti y la administración de Prieto Vallejos protagonizan también un pleito judicial por el manejo de la terminal de buses.
Ita Paraná SA, propiedad de Villasanti, tenía el control de la estación de buses, que mueve unos G. 6.000 millones al año, mediante un contrato de concesión. La firma se quedaba con el 80% de la recaudación y transfería el 20% a la Comuna. Pero el año pasado, el intendente dispuso la recuperación de la gerencia de la terminal al alegar incumplimiento de obligaciones sanitarias por parte de la firma concesionaria.