Con los controles intensivos se busca frenar los robos y estafas a los turistas que vienen a comprar a esta ciudad y que, por lo general, son conducidos por los conocidos como “pirañitas” hasta esos comercios sin patentes.
“Hay varias denuncias por robo y estafas a turistas y nos vemos obligados a controlar. Se sabe que muchas casas tienen sus supuestos guías comerciales y los trabajos que hacen. Estos no pagan patentes y cuando se les descubre se mudan. Estaremos clausurando todos los locales, luego de las notificaciones, si no se ponen al día”, indicó Javier Miranda, jefe de la División de Fiscalización.
Miranda manifestó que, una vez notificados los locales comerciales, tienen 48 horas para regularizar las documentaciones. Agregó que mantienen constantes reuniones con diferentes gremios, a fin de terminar con las prácticas ilegales contra los turistas.