El fiscal Torales, acompañado de una fuerte dotación policial, se presentó en la zona de protesta para pedir a los manifestantes a liberar la ruta para el tránsito de cargas de importación y exportación.
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La carretera fue cerrada al principio por los camioneros de menor porte que exigían al Gobierno la autorización para el despacho menor de importación. Esta medida de fuerza fue apoyada por otro grupo de manifestantes autoconvocados, disgustados con la gestión gubernamental en esta crisis sanitaria.
A raíz del cierre de ruta, unos 300 camiones de gran porte se quedaron atrapados en nuestro país sin posibilidad de cruzar el Puente de la Amistad.
Los camioneros de menor porte aceptaron sin inconvenientes el pedido del fiscal. Sin embargo, los manifestantes autoconvocados se resistieron e instaló un ambiente tenso debido a la advertencia del uso de la fuerza policial para despejar la ruta.
Tras una negociación entre las autoridades y los manifestantes, finalmente los autoconvocados despejaron la carretera y permitieron la circulación de unos 40 camiones de gran porte. La medida de fuerza proseguirá, según se informó.
Esta mañana los manifestantes autoconvocados se movilizaron sin cumplir con el protocolo de distanciamiento y obligaron a los comerciantes a cerrar sus locales. Incluso algunos negocios sufrieron rapiñas por parte de los manifestantes.