Los marinos colocaron el pórtico de metal hacia la margen izquierda del puente, en el acceso peatonal, para obstaculizar el paso de los compatriotas que retornan del Brasil.
El capitán de navío Walter Díaz, comandante del Área Naval del Este, explicó que la instalación de la estructura metálica no implica el cierre total de la pasarela. “Es un obstáculo para mantener distancia entre los agentes y los paraguayos que retornan al país. También para evitar contacto en casos de incidentes”, añadió.
Desde el inicio de la cuarentena, más de 2.000 ciudadanos regresaron al país por el Puente de la Amistad. La mayoría provenían de ciudades del Brasil, tras perder su puesto de trabajo por la crisis sanitaria mundial.
Díaz señaló que desde el lado brasileño se les aconseja a los paraguayos no abandonar el país, ya que podrían tener dificultades para entrar a nuestro país. “Los paraguayos insisten en venir y luego quedan varados en el puente. En esos casos, como medida humanitaria, la Codena (Consejo de Defensa Nacional) autoriza que pasen a un albergue temporal de Puertos”, comentó el jefe militar.