Se trata de Juan Manuel Díaz Ortiz (29), domiciliado en el Área 4, quien fue imputado por trasgredir la cuarentena y violar la ley de armas, ya que portaba una pistola 9 mm de forma irregular. Sus acompañantes Laura Belén Arriola Benítez (24), residente en el barrio San Roque; y Verónica Beatriz Sanabria González (19), también están procesadas por violar la cuarentena sanitaria.
La fiscala, igualmente, solicitó al juzgado el arresto domiciliario de los jóvenes mientras dure la investigación.
Los tres jóvenes fueron arrestados en la noche de ayer, en las cercanías de una bodega situada en el barrio Obrero, cuando se paseaban en una camioneta Ford Ranger, de color plateado y chapa MPVL 123, propiedad del intendente Prieto Vallejos.
En el interior del vehículo se encontraron botellas de cerveza y una pistola.
Díaz Ortiz fue sometido a la prueba del alcotest y el resultado salió positivo con 0,11 mg/l.
Durante el control, el joven se presentó como el supuesto secretario privado del intendente ante los policías.
Tras el escándalo, el intendente Prieto Vallejos se llamó a silencio y no atendió a nuestras llamadas telefónicas ni respondió nuestras consultas vía mensaje de texto.
36 imputados
La fiscala Cinthia Leiva imputó ayer a 36 ciudadanos inconscientes detenidos por violación de la cuarentena. Es la mayor cifra desde el inicio de los controles.