“Saramago. Sus nombres”, publicado recientemente por Alfaguara y firmado por Alejandro García Schnetzer y Ricardo Viel, es uno de los principales proyectos del centenario del nacimiento del premio Nobel, que se celebra este año.
"Este libro nos enorgullece", ha explicado hoy su viuda, Pilar del Río, que ha abierto los archivos de la Fundación José Saramago a los dos editores.
El libro es una biografía poco usual, que combina los textos del propio José Saramago procedentes de sus libros y entrevistas, acompañados por cientos de fotografías, muchas de ellas inéditas, procedentes de un arduo proceso de investigación.
Pilar Reyes, directora editorial de Random House Mondadori, cree que el libro "es casi una 'rayuela'": puede ser leído sin orden o en sentido lineal y conforma además un universo hasta ahora poco conocido del escritor portugués.
El libro incluye más doscientas entradas con información clave de la vida de Saramago en cuatro epígrafes: "Espacios/lugares", "Lecturas/sentidos", "Escritos/creaciones" y "Lazos/personas", siempre acompañadas por fotos y textos del escritor.
Se puede descubrir cómo era un asiduo a la Biblioteca del Palacio de las Galveias o cómo su primer libro lo compró ya con 19 años y con el dinero que le prestó un amigo. También su predilección por Mafalda, un personaje "sabio y subversivo" de quien aseguraba ser "un discípulo fiel".
El libro revela el crisol de influencias de su larga vida, formado por escritores como Lorca, Rilke, Kafka, Alberti o Pessoa, pero también por filósofos, pintores, cineastas y bailarines como María Pagés, Pedro Almodóvar, Fellini, Giotto, Paco Ibañez o Chopin.
Es posible bucear en los primeros años de vida del escritor, la aldea que le vio nacer, el primer cine que pisó -Salao Lisboa-, o las numerosas ciudades a las que viajó tras recibir el Nobel.
La primera vez que salió de Portugal fue con 45 años a París. "Lleva uno toda la vida soñando con París y después uno llega allí, ve el Sena, que es algo así como el Tajo visto por el otro lado del binóculo", escribía el escritor. Pese a la decepción inicial, luego reconoce que la ciudad le conquistó.
También aparecen entradas de Sevilla, Siena, Sarajevo, la RDA, Palestina, China y numerosos lugares de Latinoamérica como Cuba, México o Brasil, con los que tuvo una conexión especial. "Saramago se enamoró de América Latina, masas de gente que querían oírlo", ha explicado Pilar del Río.
El libro incluye material inédito como escritos preparatorios de "El año de la muerte de Ricardo Reis" y correspondencia con Carmen Bacells o el escritor Gunter Grass.
“José Saramago. Sus nombres” está acompañado por una exposición de pequeño formato en Casa de América de Madrid hasta el 27 de mayo, con una decena de fotografías que hablan de su conexión con América Latina y en las que aparece junto a Gabriel García Márquez o Benedetti entre otros.