Con un acto celebrado en el local de la Fundación Texo, Daniel Nasta hizo un recuento de todo lo acontecido para llegar a este momento. Fue gracias al embajador paraguayo en Estados Unidos, Germán Rojas, que conectaron con Annick Sanjurjo y Alberto Casciero.
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“Cuando hablamos con Alberto, me dijo: ‘a ustedes los estábamos buscando, porque queríamos que esta colección de ñandutíes quedara en Paraguay y que no tuviera que estar en alguna universidad norteamericana, sino que pudiera ser disfrutada en Paraguay por paraguayos y extranjeros”, relató.
“Yo digo que un sueño es un camino del futuro y nosotros soñamos con esta posibilidad. Las cosas se fueron sucediendo para que lleguemos a esto”, refirió también Nasta en la misma ocasión en que se lanzó el libro “Ñandutí, encaje del Paraguay”, en el que Annick Sanjurjo resume años de investigación acerca del tradicional tejido.
La sala se puede visitar en el local de Fundación Texo (Paraguarí 852) de miércoles a sábados de 16:00 a 20:00.
Una ventana al arte popular
A su turno el artista y escritor Fredi Casco habló sobre la curaduría de la sala y la búsqueda artística que hay con este espacio. Él narró también la historia de este logro, ya que hace 10 años Martín Nasta, actual vicepresidente de la Fundación Texo, le expresó que querían hacer “Selección Texo 2″, un programa de responsabilidad social de las empresas Texo hacia el arte contemporáneo.
El tema de la edición 2011 fue sobre artistas emergentes y luego se pensó en “una de las manifestaciones más fuertes que se estaba dando en Paraguay, y que son contemporáneas: el arte popular campesino y el arte indígena”. “Hablamos sobre la posibilidad de mostrar esto de otras maneras posibles y acercarlo a un público que hasta ese momento se encontraba alguna manera lejano”.
“Eso tuvo como resultado ‘Selección Texo 2 - Maestros del Arte Popular Indígena en el Paraguay”. Seleccionamos artistas que estaban vivos y trabajando en ese momento. Con un equipo armado con Renate Costa como directora de unos documentales, Fernando Allen como cocurador de Selección Texo 2, recorrimos los confines del Paraguay en busca de estos maestros y maestras. Resultado de eso fue una exposición que se dio en 2003 en el Centro Cultural de España Juan de Salazar y al año siguiente en París”, detalló.
“Esa colección, en buena medida, está presentada hoy al lado de la valiosísima colección de ñandutíes donada por Alberto y Annick”, dijo, para luego destacar que estos textiles “son del siglo XIX y XX, o sea son históricos; es una colección que es invaluable. Decidimos hacer el lanzamiento el Día de la Mujer Paraguaya porque gran parte, si no es la mayoría, de las manos artesanas de Paraguay pertenecen a mujeres y nada más”.
Por su parte Vivianna Dioverti, directora ejecutiva de la Fundación Texo, aprovechó la ocasión para anunciar que la institución trabajará en alianza con el Centro Cultural de España “Juan de Salazar” para ofrecer talleres de formación que comenzarán en el mes de marzo y se extenderán hasta noviembre.
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También resaltó el lanzamiento del libro escrito por Annick. “Me atrevo a decir que ha de ser el único libro en Paraguay más completo. Estamos muy orgullosos de tener este material tan rico, importante y extenso”, señaló Dioverti.
Un impulso a la creatividad
En el acto también se hizo presente el ministro de Cultura Rubén Capdevila, quien otorgó a Annick y Alberto un reconocimiento por su aporte. Además, adelantó que la Fundación Texo será reconocida con el premio Óscar Trinidad, que es otorgado a organizaciones y gestores culturales “que con su trabajo fortalecen engrandecen aportan muchísimo a nuestra cultura”.
“Esto es un aporte a la cultura paraguaya, es un incentivo y un ejemplo para muchos coleccionistas que seguramente tienen esos acervos, piezas de la historia, que vienen conectando con mucho esmero con mucho, amor, que vienen constituyendo sus colecciones”, cerró.
El acto inaugural contó también con la presentación de la cantautora nivaclé Bianca Orqueda, quien ofreció su arte musical a los presentes.