La exposición, que hoy a las 19:00 se inaugurará en la sede de la Embajada de México (España 1428 c/ San Rafael), está acompañada por el mural “Flor y canto”, plasmado días atrás por el artista en una de las paredes de la sede diplomática.
Según explicó el Embajador de México en Paraguay, Juan Manuel Nungaray, este mural busca representar cuatro aniversarios muy importante para la historia de México: los 700 años de la fundación de Tenochtitlán, la gran ciudad de México; los 500 años de la resistencia indígena y de la ocupación militar española; los 200 años de la consumación de la Independencia de México, que se recordará el próximo 27 de septiembre; y los 100 años del Muralismo Mexicano.
En la obra de Fósil, estos números están unidos por el Quetzalcóatl, “que transita todo el mural como un elemento narrador e integrador de toda la historia”, subrayó el artista.
En el mural aparecen lugares históricos y personajes como La Malinche, el conquistador español Hernán Cortés, y los principales referentes de la Independencia de México como Miguel de Hidalgo y Costilla, doña Josefa Ortiz de Domínguez, José María Morelos y Pavón, e Ignacio Allende.
También figuran un guerrero azteca, una representación de las tribus nahuatlacas, y un “jinete actualizado donde se hace alusión a la eterna conquista por los territorios de los pueblos originarios, que sigue vigente, y también lo vemos con los aborígenes guaraníes”, explicó Fósil. En el mural representó además el México moderno a través del Palacio de Bellas Artes, la antigua Basílica de la Virgen de Guadalupe, el Palacio Nacional y el zócalo con su bandera mexicana.
En los 15 cuadros que componen la exposición, que cuenta con la curaduría de la artista paraguaya Noelia Duarte, Fósil plasma diferentes elementos de la historia y de las costumbres del Paraguay que observó, el año pasado, cuando inesperadamente debió permanecer en el país por cinco meses, debido a la pandemia. El Mariscal López, los Niños de Acosta Ñu, las Residentas, la trama del ñandutí, la “silla cable”, el tereré, el mongaru y otros elementos aparecen en estas coloridas pinturas, que también buscan ofrecer una reflexión sobre temas como la pandemia, la dictadura y la justicia social.
Recordó que a fines de enero de 2020 llegó para un Encuentro Internacional de Muralistas en Colonia Independencia y luego desarrolló otros proyectos, pero su regreso a México en marzo se vio anulado por el covid-19. “Ya no pude volver porque se cancelaron los vuelos, se cerró todo y fue donde empecé a desarrollar estas obras”, detalló. Agregó que si bien su trabajo habitualmente es en murales, estas son de las pocas obras que desarrolló en caballete.
La exposición permanecerá hasta el mes de julio en la sede de la Embajada de México. Las visitas se pueden hacer con reserva previa al (021) 339-4148.