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ACAHAY, Dpto. de Paraguarí (Aldo Lezcano, corresponsal). La familia está hacinada en una sola habitación, a unos 5 kilómetros del centro de esta ciudad. La mujer tienen 40 años y presenta signos de desnutrición.
María de la Paz vive postrada en una cama desde hace 12 años atrás. Perdió la movilidad de las piernas en forma paulatina después de tener a su quinto hijo. Desconoce los motivos porque nunca tuvo la oportunidad de ir a un médico, según relató.
Tres de sus hijos aun son menores de edad. También convive con un nieto y otros familiares, todos en una precaria habitación de madera.
En el sitio únicamente hay dos camas y no tienen otra opción de que dormir en ellas todos juntos. La mujer, que se la ve enferma, duerme con tres de sus hijos, segun cuenta. En la otra cama lo tienen que hacer cinco personas.
Además, la familia no cuenta con servicios básicos como energía eléctrica o agua potable. Tampoco tienen un baño con inodoro. En el fondo del patio solo hay una letrina común.
La señora cuenta que el padre de su último hijo vive con ellos, pero –según sostuvo– duerme en una casita cercana.
La familia recibe el beneficio social del programa Tekoporã, pero el dinero no es suficiente para cubrir las necesidades básicas.
Una acahaiense solidaria se apiadó de la situación y llevó alimentos no perecederos y otras mercaderías, así como ropas y un colchón. Gestionó los donativos con otras familias de esta localidad. Los benefactores también están gestionando la conexión del servicio eléctrico a la casa.
En cuanto al agua potable, la familia seguirá acarreándola en baldes desde un manantial. La fuente se encuentra a unos 800 metros de la casa. Los pobladores piden la intervención de instituciones públicas.