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No hay fronteras cuando de música se trata. Un arpa paraguaya y una guitarra británica son hoy hermanas musicales luego de un encuentro fortuito, el año pasado, entre nuestro compatriota Ismael Ledesma y el inglés Richard Durrant. “Yo asistí a un concierto de él en Londres y, luego, tuve la oportunidad de conversar con él, quien justamente estaba intrigado por el arpa, instrumento que ya conocía”, contó Ismael, en una comunicación telefónica desde Sussex, Inglaterra, donde está ubicado el estudio de Durrant y grabaron el disco denominado Durrant y Ledesma, cuyo contenido podremos escuchar el viernes en el CPJ (Julio Correa y Domingo Portillo).
“Luego, nos encontramos, tocamos y, automáticamente, nació la idea de grabar juntos, porque quedamos impactados el uno del otro. Él organizó una gira y preparamos un repertorio mezclando muchas de mis obras, músicas paraguayas y música que él compuso”, relató el arpista. Esta gira los llevó a ofrecer más de 10 conciertos en distintas ciudades de Escocia e Inglaterra.
Para un show que ofrecieron en enero pasado, en el Ropetackle Arts Centre, en Reino Unido, las entradas se agotaron días antes del evento. Este hecho fue algo “impresionante” para Ledesma. “Richard Durrant ya tiene su público en Reino Unido, y lo que está haciendo ahora es innovando en su repertorio, me está incluyendo a mí y su público quiere ver algo nuevo. Entonces, eso es lo que estoy aportando. El público es curioso y quiere ver lo que hacemos”, indicó.
Puro entusiasmo
El nuevo álbum es algo que tiene entusiasmado a Ledesma. Sobre el estilo, dijo que “es complicado descifrar”. “Es como un nuevo folclore, digamos. Con todos los conocimientos de Richard se nota un poco la parte clásica, así como sus conocimientos de músicas del mundo. Yo soy el que da el color más latino y, más o menos, folclórico, pero él sofistica mucho la música. Es un gran guitarrista que sabe tocar de todo y aporta muchísimo”, señaló.
El disco, que será lanzado aquí, cuenta con 11 temas, entre los que se encuentra Guarania para Shoreham, escrito por ambos. Además, esto se suma al acontecimiento especial que significará para Ledesma interpretar estas obras en el Paraguay. “Estoy celebrando mis 35 años de carrera e invité a Richard exclusivamente para celebrarlos juntos, y tendré otros invitados, como los arpistas paraguayos Marcelo Rojas y María Fernanda Peralta, y el tecladista Carlos Centurión”.
Por otro lado, el artista lanzó recientemente su disco n.° 20, denominado El indio errante, que también presentará en este show. Ledesma comentó que eligió ese nombre porque se considera como un errante que va por diferentes lugares para tocar. El material contiene nuevas composiciones del artista, inspiradas en su diario vivir en Francia y dos obras que lo han acompañado desde que era niño.
Música real en un álbum muy personal
Richard Durrant, al otro lado del teléfono, esperaba su turno para hablar. Lo primero que nos contó fue lo que le llamó la atención de Ismael y el arpa. “He escuchado mucha música paraguaya por muchos años. Fui al Paraguay por primera vez en el 2011, por lo cual es muy especial para mí. Escuché sobre Ismael muchas veces y, sobre todo, de su trabajo, ya que tengo un par de álbumes suyos”, relató. Luego del encuentro que tuvieron en su show, se volvieron amigos “muy rápido”. “Tenemos la misma edad y nos entendemos muy bien el uno al otro, a pesar de que mi español no sea muy bueno; su inglés es mejor que mi español (risas)”.
La experiencia de tocar junto con Ismael, para Durrant, es algo “hermoso”. “Parece una cosa muy natural lo que estamos haciendo. Incluso, los instrumentos se han vuelto amigos: la guitarra y el arpa trabajan de forma muy natural juntas, lo que es algo encantador. Es genial oír ecos del Paraguay que vienen del arpa de Ismael, por más que esté establecido en Europa. Además, tengo influencias de la música folclórica europea, así que es un sonido híbrido y real el que hicimos”, mencionó el guitarrista y destacó, también, el hecho de que ambos vienen tocando hace mucho tiempo. “Tuvimos trayectorias similares”, subrayó.
“El álbum va a sonar hermoso”, afirmó Durrant. Una de las cosas más agradables para él es que todos los arreglos que se escuchen serán originales; así también, habrá temas inéditos compuestos en conjunto. “No hay arreglos de música de otras personas; será nuestra propia música, por lo que va a ser un álbum muy personal”, calificó el artista.
Para el guitarrista, la música une, por lo cual no siente que con Ismael sean de culturas diferentes, a pesar de haber nacido en lugares tan distantes. “Desde los 8 años escucho la música de Agustín Barrios, y estoy muy familiarizado con la música sudamericana y paraguaya, especialmente. Grabé mi primer álbum de Barrios en el 2011, antes de ir invitado al Paraguay”, rememoró. En aquel tiempo, Durrant vino a nuestro país a presentar su álbum The Number 26 Bus to Paraguay, en San Juan Bautista, Misiones, cuna de Mangoré.
Lo más importante para el músico es transmitir “la amistad musical”, por lo que espera que esta conjunción inspire al mundo. “Es un momento muy difícil para muchas personas, ya sea con las recientes elecciones norteamericanas y, personalmente, con el Reino Unido saliendo de la Unión Europea, con lo que no estoy de acuerdo, porque creo que deberíamos habernos quedado. Es por eso que pienso que representar el intercambio de culturas es muy importante. Me siento muy bendecido y contento de ser músico, porque creo que la música puede hacer una diferencia, y el mundo debe tratarse de amistad, arte y comprensión, así que si alguien recibe un poco del mensaje de nuestro álbum, voy a ser muy feliz”, reflexionó.
El encuentro que un día se dio entre dos personas que se admiraban mutuamente llegará a la concreción de un sueño: un disco. Pero, sobre todo, podrán cumplir su objetivo: derribar todas las fronteras gracias a la música. El concierto que darán en el Paraguay se realizará dentro del importante marco de los 35 años de carrera de Ledesma como arpista y significará el retorno de Durrant a una tierra que ama como propia.
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Entradas: G. 150.000, en Fausto Cultural (Eligio Ayala 1060 e/ EE. UU. y Brasil) y Jardín de la Paz (avenida República Argentina 1512).
Fotos Gentileza/Archivo.