El nombre de Roque Fabiano Silveira saltó nuevamente a la luz pública en los últimos días. Este brasileño radicado en Salto del Guairá es señalado como uno de los que ocultó a su compatriota Darío Messer mientras se encontraba prófugo y de haber hecho de intermediario para las comunicaciones entre ese procesado por lavado de dinero y su “hermano del alma”, el expresidente paraguayo Horacio Cartes.
Silveira se encargó de entregarle a Cartes una carta en la que Messer le pedía US$ 500.000 para pagar sus gastos desde la clandestinidad y conversó en varias oportunidades con el político colorado, según el Ministerio Público brasileño.
Aunque desconocido para muchos, Roque Fabiano, apodado “Zero Um”, tiene frondosos y oscuros antecedentes en Brasil, Paraguay y Estados Unidos.
Asesinatos y desaparición
La primera vez que el nombre de Roque Fabiano Silveira saltó en los medios paraguayos fue en 2002. En aquel entonces familiares de Tito Ojeda, un humilde trabajador, denunciaron su desaparición.
Según cartas enviadas al corresponsal de ABC Color Pablo Medina, su desaparición habría estado ligada a la caída de una avioneta en Salto del Guairá. “A lo mejor se lo llevó para rescatar alguna mercadería y luego fue eliminado. Otro rumor que hubo es el robo de vaca de la estancia de Roque da Silveira. A lo mejor participó en eso y después lo mataron”, relataba la hermana de Tito.
Con el tiempo se terminaría revelando quién era realmente Silveira. Según datos del Poder Judicial brasileño, huyó de Brasil luego de que se lo vinculara con el asesinato de un empresario en 1996.
Desde entonces se estableció en Salto del Guairá, para convertirse en un exitoso “empresario de frontera”. En 2006 su nombre fue vinculado nuevamente a otro asesinato en Brasil, pero esa vez de un funcionario de la Receita Federal (Hacienda).
Cigarrillos, el buen negocio
En el Paraguay Silveira abrió una fábrica de cigarrillos: Tabacalera Central, ubicada en San Lorenzo. Enseguida el nombre de su propietario comenzó a ser vinculado con irregularidades y contrabando de cigarrillos a su Brasil natal.
En 2005 fue decomisado un enorme cargamento de cigarrillos listos para ser contrabandeados al Brasil, en la misma estancia en la que había desaparecido Tito Ojeda. En 2006 fue detenido en Estados Unidos por formar parte de una red de contrabando de cigarrillos junto a otra docena de tabacaleros.
En 2009, una investigación del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) reveló que Silveira se había convertido en una de las cabezas del contrabando de cigarrillos al Brasil y al mundo.
Paraguay proveía ya entonces el 10% de los cigarrillos contrabandeados a nivel mundial. Se había ganado el apodo de “Zero Um” (capo) y lo consideraban un hombre temible.
Varias veces atropelló a autoridades policiales de Canindeyú acompañado de capangas armados, seguro de ser amo y señor de la zona.
Estuvo vinculado sentimentalmente con la actual pareja del narco Jorge Samudio, alias Samura, jefe del peligroso grupo criminal PCC, que también se dedica al contrabando.
Eso sí, en casi 20 años de presencia en Paraguay y a pesar de las numerosas denuncias periodísticas y los informes que llegaron desde el extranjero, nunca fue investigado. Solo ahora que el Brasil lo busca.