Con el procedimiento, buscan complicar aún más la expulsión de los diputados, en especial la del imputado Ulises Quintana (ANR, Añetete), del acusado Carlos Portillo (PLRA, efrainista) y del imputado Tomás Rivas (ANR, cartista), cuyos pedidos de pérdida de investidura están pendientes de tratamiento hace varios meses.
La intención de los diputados sería aumentar la cantidad de votos que se requiere para expulsar a un legislador, es decir que de una mayoría simple (mayoría de los presentes) se requiera de una mayoría absoluta; es decir 41 votos de los 80.
En el artículo 120 de la Constitución Nacional, que establece la pérdida de investidura no se especifica la cantidad de votos que se requieren para expulsar a un parlamentario, pero el artículo 185 de la Carta Magna llena ese vacío y señala que “salvo los casos en que esta Constitución establece mayoría calificadas, las decisiones se tomarán por simple mayoría de votos de los miembros presentes”.
De tratarse y aprobarse un procedimiento, la próxima semana serán tratados los pedidos de expulsiones pendientes, según prometieron el lunes en reunión de la mesa directiva. El líder de la bancada cartista, Basilio “Bachi” Núñez, afirmó que ellos plantearán ante el pleno que se establezca la mayoría absoluta, es decir 41 de 80 votos con lo que no se descarta que sea esta la versión aprobada.
Quintana está imputado por varios delitos entre ellos por supuesto vínculo con el narcotráfico. Mientras que Portillo está acusado por supuesto tráfico de influencias y Rivas, imputado por estafa y otros delitos.