Salida de Abdo no se llegó a evaluar en el Congreso

Pese a los fuertes rumores que corrieron al hacerse públicos los detalles de la firma del acta sobre Itaipú, el juicio político a Mario Abdo Benítez en el Congreso, que hubiese dejado la presidencia en manos de Hugo Velázquez hasta el 2023, no se llegó a evaluar seriamente, coincidieron fuentes consultadas.

Hugo Velázquez, vicepresidente de la República, hubiera sucedido a Abdo Benítez, de ser este destituido.
LO QUE DICE LA CONSTITUCIÓN
audima

Desde el miércoles 24 de julio, cuando se produjo la renuncia del presidente de la ANDE Pedro Ferreira, los acontecimientos políticos se precipitaron en la medida que se iban conociendo más detalles del escandaloso Acuerdo Bilateral con el Brasil.

Lo que al principio parecía una cuestión de criterios dispares sobre la compra rutinaria de energía de Itaipú, se reveló muy pronto como una cuestión que afectaba directamente los altos intereses nacionales.

Vocablos como “traición”, “entreguismo” y “juicio político” comenzaron a rodar en boca de dirigentes de la oposición y también de dirigentes del Partido Colorado. Las aclaraciones que intentaba el embajador en Brasil Saguier Caballero solo contribuyeron a oscurecer las cosas para el Ejecutivo.

El viernes, el Senado se reunió en sesión extraordinaria y emplazó con 72 horas al Ejecutivo a informar del acta en el marco de, todavía, pequeñas manifestaciones ciudadanas. También convocó para el lunes a todos los altos funcionarios vinculados a la negociación de la cuestionada Acta.

El fin de semana fue un tembladeral político y los rumores de un juicio político al presidente de la República, si no daba marcha atrás con el acta, se manifestaban abiertamente. Sin embargo, en el Congreso no se llegó a hacer una evaluación de los votos, aseguraron fuentes de la oposición.

La decisión del Ejecutivo manifestada en la conferencia de prensa del canciller Luis Castiglioni el domingo a la noche y la posterior renuncia de los cuatro altos funcionarios cuestionados tuvieron el efecto de “desinflar” el ambiente.

De haberse llegado al lunes sin una movida como la que hizo el Ejecutivo, el posible juicio político a Abdo Benítez hubiese comenzado a analizarse con mayor seriedad.

La eventual destitución del mandatario hubiera dejado la dirección de país al vicepresidente de la República Hugo Velázquez hasta el 15 de agosto de 2023 y se hubiese convocado a elecciones para elegir nuevo vicepresidente, según establece el artículo 234 de la Constitución (ver cuadro).

El único antecedente de elecciones para elegir vicepresidente se dio en agosto del año 2000, en las que resultó ganador Julio César Franco (PLRA), que estuvo en el cargo hasta 2002.

Lo
más leído
del día