“El CAMSAT es una asociación comunitaria, de personas que componen el barrio. Pagan una cuota familiar de 2 mil guaraníes al mes y tienen compromisos, como participar en la formación de la organización y actividades comunes”. Esto nos dijo el padre Pedro Velasco, que vive en el Bañado Tacumbú desde 1986. El es uno de los principales propulsores de la organización.


Comentó que está contento, porque el 1 de diciembre festejarán el 19° aniversario de CAMSAT. Porque cada año es una lucha la subsistencia de la organización por la falta de presupuesto.

“Estamos en una zona suburbana de pobreza extrema. Casi el 90% de las familias está sin trabajo. Se ganan el sustento haciendo reciclado, o de changador, estibador de autos, carreros”, resaltó.

Acotó que el ingreso familiar mensual en la zona no llega a los 600.000 guaraníes, según estudio hecho hace un año y que “los más de 1.000 jóvenes de entre 14 y 20 años no tienen colegio en el barrio. Los que quieran estudiar deben caminar varias cuadras para llegar”.


SOBREVIVIR CON DIGNIDAD

El padre Pedro Velasco indica que el CAMSAT había surgido como una respuesta de la gente pobre de organizarse, formarse, de capacitarse, de recuperar la voz, de cara a la sociedad y la Municipalidad.

El principal objetivo que tiene es capacitarse y sobrevivir a la pobreza con dignidad.
Por eso fueron surgiendo los servicios comunitarios que actualmente funcionan en la comunidad.

Destacó que la primera tarea importante realizada por la organización en 1991 fue traer el agua potable al barrio para 1.000 familias. Después, a nivel de vivienda y a través de CAMSAT, se construyeron cerca de 500 viviendas en 19 años.


SERVICIOS PERMANENTES

En cuanto a los servicios que presta, el sacerdote resaltó el dispensario, donde funcionan consultorios de ginecología, pediatría, clínica médica.
Igualmente, se tiene una escuela no formal para reforzar la escolaridad de unos 200 niños.
En el área de educación provee cada año 100 becas para bachillerato.

“Necesitamos más becas para universitarios”, resaltó.

Velasco mencionó, igualmente, que en el barrio cuentan con un almacén de consumo, un comedor infantil donde comen 85 niños, de lunes a sábado, y se da merienda a 140 criaturas. Poseen, además, un área de crédito solidario con muy bajos intereses.

“El objetivo es ampliar los ingresos familiares, capacitar a la gente y contribuir en la organización de la gente”, subrayó Velasco, a la vez de significar que en el funcionamiento de la organización cuentan con 40 grupos de cinco personas, que en total hacen a 200 integrantes.
Aparte, funciona en la zona una radio comunitaria, denominada Tape Pyahu, y un área de emergencias y franja costera.

NULO APOYO DEL GOBIERNO

“CAMSAT es una organización de resistencia, de denuncia y de suplencia de lo que el Estado no hace.


Resistimos ante una situación de pobreza extrema, que es injusta y sin sentido.

Le damos de comer a los niños, hacemos viviendas porque el Gobierno no funciona.
A pesar del Estado ausente, queremos vivir dignamente y nos remangamos y hacemos lo que podemos. Los políticos se acuerdan de los pobres solo en época de elecciones”, dijo el pa’i.

elvira@abc.com.py