Liseras señala graves deficiencias que socavan su derecho a la defensa y presunción de inocencia. El abogado, a pesar de no haber sido imputado por lavado de dinero, aun así fue acusado por el Ministerio Público por el hecho punible referido, a pesar que el art. 355 del Código Procesal Penal es claro al disponer que no se podrá acusar si antes no se ha dado oportunidad suficiente para tomar la declaración indagatoria.
También señala la apelación que el delito de lavado de dinero no es una imputación autónoma, sino que surge como consecuencia de la investigación del hecho punible de tráfico de tráfico y comercialización de drogas peligrosas. El apelante aclara que oportunamente había sido sobreseído del delito de narcotráfico, es decir, la causa que sustentaba el supuesto lavado de dinero, ha desaparecido.
Este proceso penal se inició a partir de una intervención realizada el 7 de diciembre del año 2016, cuando agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas allanaron una casa en Villa Elisa, donde se incautaron de 308 kilos de cocaína, y otros operativos que concluyeron con la aprehensión de los acusados, a los que los sindican de estar vinculados con el cartel de Sinaloa.
También fueron a juicio oral Jimmy Wayne Gallién Córdova, Marco Antonio Castro de la Rosa, Martín Víctor Manuel Huerta Flores y Armando Carrillo Flores.