Se trata de Hugo Andrés Ramírez Vera (21 años), quien fue ubicado en una vivienda del refugio para damnificados instalado en el predio del cuartel militar del R.I. 14 en el barrio Tacumbú de Asunción.
En el mismo operativo fue capturado Sergio Romario Florentín (19), quien de acuerdo a datos brindados por el jefe del departamento Prevención y Seguridad Ciudadana de Asunción, comisario principal Carlos Cáceres, sería cómplice.
El atroz ataque se produjo poco antes de las 07:00, sobre la calle Coronel Lirio casi Trejo de Sanabria del barrio Sajonia de la capital. Cámaras de seguridad instaladas en las inmediaciones captaron el momento en que el sospechoso emboscó y atacó a la niña de 15 años que a esa hora se dirigía a un establecimiento educativo del barrio.
En el momento en que se iban a cruzar, el maleante se abalanzó sobre la menor de edad y la tumbó boca arriba sobre la vereda, luego con una pierna la sujetó contra el piso y comenzó a buscar, aparentemente, en los bolsillos del pantalón de la niña, quien intentaba resistirse con todas sus fuerzas, lanzando patadas al aire y pidiendo auxilio a los gritos.
Allegados de la adolescente mencionaron que la misma llevaba un teléfono celular, que aparentemente no fue robado por el malviviente. Algunos investigadores señalaron que el hecho también pudo tratarse de un ataque sexual, que duró unos 40 segundos, hasta que algunos vecinos se percataron de lo que estaba ocurriendo y salieron a la calle para ahuyentar al criminal. Supuestamente, Ramírez corrió una cuadra y luego fue rescatado por su cómplice a bordo de una motocicleta.
En cuestión de horas las imágenes del feroz ataque se viralizaron en los grupos de WhatsApp, lo que obligó a la Policía a montar un aparatoso operativo en la zona del Bañado Sur de la capital para tratar de capturar al maleante.
Sin embargo, recién en horas de la tarde los agentes lograron identificar al sospechoso, quien supuestamente residía en el refugio de damnificados instalado en el cuartel del R.I. 14, en el barrio Tacumbú.
Los uniformados rodearon el sitio y tras una rigurosa revisión, finalmente, ubicaron a Ramírez en la precaria vivienda de su cómplice Florentín.
El sospechoso estaba escondido debajo de una cama, de donde fue sacado por los uniformados.
Ambos detenidos fueron derivados al departamento de Investigación de Hechos Punibles de la capital, para ser interrogados, ya que existen sospechas de que los mismos habrían perpetrado un golpe similar en el mismo barrio.