Se presume que personal de una estancia de la zona hizo la quemazón de sus pastizales, como es costumbre, y el fuego llegó hasta la franja de seguridad de la Transchaco, donde se encuentran los cables.
Como la Copaco hace años no cuenta con un equipo técnico para reparar los cables cortados, el miércoles a la tardecita arribó una delegación desde Asunción a la zona, aunque recién ayer a las 09:00 los técnicos llegaron al lugar de las quemazones, es decir ya casi un día después del corte. “Están trayendo los cables de Asunción. Son cuatro kilómetros para montar de nuevo, esperamos lo más pronto que se pueda repararlo. Estamos muy preocupados y apurando el trabajo. Creemos que los técnicos van a hacer el máximo esfuerzo posible para normalizar el servicio. Apenas llegue el camión con los cables desde Asunción, van a montar el tramo dañado, se estima que podría tardar hasta mañana (hoy) alrededor del mediodía”, dijo Cáceres.
La Copaco tenía dos cables de fibra óptica en cada lado de la Transchaco, para evitar que el servicio se interrumpa. Pero la otra línea fue cortada por la duplicación de la Transchaco, actualmente en construcción y ya no sirve más. “Íbamos reparando, pero a medida que se reparaba las máquinas cortaban otra vez en otros lugares. Hacía imposible seguir con las reparaciones del cable subterráneo”, añadió. Esto no es nada nuevo. Los cables de fibra óptica ya han sido cortados numerosas veces en el Chaco Central, por contratistas del acueducto, de la Transchaco y por máquinas de particulares.