Mientras el herrumbre se extiende cada vez más por sobre los diversos sectores de la fábrica de Acepar y pareciera que la suerte final de esta desafortunada siderúrgica chaqueña está echada hace tiempo, de vez en cuando surgen informes sobre supuestos o posibles interesados en reactivar de nuevo la fabricación de acero en dicho lugar.
“Los nombres de las empresas o de los grupos o sus responsables no puedo mencionar, porque se han firmado acuerdos de confidencialidad para las conversaciones; pero eso mismo indica que efectivamente existen interesados en reactivar la acería”, sostuvo Vinader ante nuestra insistencia por conocer hasta dónde puede ser serio el interés en levantar de nuevo Acepar, que ya lleva al menos 27 meses sin producir absolutamente nada.
Aclaró, sin embargo, que obviamente se está en una etapa de conversaciones, en que los empresarios y sus asesores van midiendo las posibilidades de éxitos y los recursos que precisarían para ello, y negociando de paso las condiciones económicas y legales que se establecerían en caso de llegarse a un contrato con Acepar.
Una nacional, otra brasileña
Uno de los grupos con el que se está hablando es nacional, “integrado por ejecutivos de conocida solvencia empresarial, y llevamos de tres a cuatro meses negociando, pero no puedo vaticinar aún a qué resultados podría llegar, y lo mismo con respecto a la otra empresa, que es de origen brasileña, también es una firma muy seria. Con esta las negociaciones llevan como un mes”, contó la fuente.
La base que pone Acepar –añadió– es siempre a partir de una inversión de alrededor de US$ 20 millones, aunque los propios interesados se dan cuenta de que debe ser mucho más para asegurar una producción rentable y sostenible en el tiempo, por lo que las cifras no están definidas todavía.
Con relación a las otras condiciones, reveló que ambos interesados solicitan un pasivo laboral cero, “quieren libertad de contratar” a los operarios que realmente van a necesitar, pues todo va a ser gradual, el reacondicionamiento de la fábrica, las reparaciones o la incorporación de nuevas maquinarias. Según Vinader, esa condición le parece hasta sensato, porque de lo contrario cualquier arrendador empezaría ya con un gasto fijo de casi US$ 500.000 en materia de salarios, unos US$ 6 millones en un año, lo que sería inviable.
Preguntado si ya consultaron con los sindicatos de Acepar sobre ese tema, ya que suele ser una de las principales trabas en el funcionamiento de la siderúrgica, el interventor judicial dijo que la dirigencia obrera está, en principio, de acuerdo con una eventual recontratación gradual.
Antecedentes
En febrero de 2019 se había esfumado el último intento de inversión en Acepar al rescindirse un acuerdo de inversión por US$ 126 millones firmado en junio de 2018 con la empresa china Henan Complant Mechanical & Electrical Equipament Group (HCME), representada por su presidente, Jianxun Si Molina, y su representante para Sudamérica, Ing. Pavel Aracena Vargas. Se argumentó incumplimiento de varias cláusulas por parte de la compañía asiática.
Era el segundo contrato de alquiler que se dejaba sin efecto desde la intervención judicial de la acería (noviembre de 2013). El primero fue con la firma brasileña Vetorial, que se retiró en enero de 2018 tras tres años de producción a medias. La empresa china HCME no llegó siquiera a producir.