“Es cuestión de tiempo. Si el Ministerio del Trabajo no presenta figuras más blandas para flexibilizar las horas laborales y un canal más rápido para el empresariado, el golpe puede ser muy grande para los empresarios y, por ende, para los trabajadores”, alertó el fin de semana la titular de la Asociación Industrial Hotelera del Paraguay (AIHPy), Cecilia Cartes.
En comunicación con ABC, contó que el 85% de los hoteles que pertenecen a la asociación que dirige está cerrado, y que el restante está operando con una cantidad muy baja de huéspedes que llegaron antes de que se decretara la cuarentena. “Nuestra caída es del 100%. Necesitamos subsidios para los salarios. No vemos soluciones reales para nuestro sector”, afirmó.
Cartes explicó que esta pandemia ya ocasionó el cierre temporal de los hoteles y que si estos no encuentran una vía rápida de recuperación –que viene de la mano de la conectividad aérea y tarifas con beneficios– muchos no podrán sobreponerse y el cierre será definitivo. “Es por eso que necesitamos la flexibilidad de los contratos laborales para poder garantizar a las personas un ingreso mínimo que no corte la cadena de valor y minimizar el impacto a las familias que dependen de este rubro”, expresó.
La empresaria hotelera recordó que en estas más de dos semanas de cuarentena, las medidas de vacaciones y salidas voluntarias ya se fueron implementando. “Creo que si no nos permiten la flexibilización de las jornadas laborales y de los salarios, con la oportunidad de pagar por las horas trabajadas, los empresarios sacarán créditos para el capital operativo, pero conservarán solo el personal más necesario, ya que al no tener pasajeros, se cuenta con bastante personal ocioso”, detalló.
Medidas de aislamiento
La pandemia que azota al mundo entero impactó al sector turístico principalmente y de manera abrupta, ya que al tomarse las medidas de aislamiento obligatorio y cuarentena en los distintos países, se minimizó la conectividad aérea a nivel mundial, se cerraron las fronteras y, por ende, las reservas de cancelaron.
Las disposiciones para evitar la rápida propagación del covid-19 afectan también a los restaurantes, bares, centros comerciales, agencias de viajes, negocios del entretenimiento, entre otros, afines al turismo y que emplean a 20.000 personas aproximadamente. “Necesitamos que el Estado sea nuestro aliado y el apoyo de los colaboradores en las medidas que vamos a tomar para poder subsistir y poder salir de esta crisis juntos”, expresó Cartes.