REPATRIACIÓN (Por Víctor Daniel Barrera Burgos, de nuestra redacción regional). La lluvia trajo calma en la zona pero sigue un fuerte contingente policial resguardando la seguridad.
Tras el duro enfrentamiento entre policías y labriegos del Movimiento Campesino Paraguayo (MCP), quienes el martes intentaron quemar una moderna cosechadora que se encontraba operando en las tierras en disputa, los productores se encuentran trabajando más tranquilos dentro de las propiedades y por el momento no se registró ningún roce o incidente entre las partes en conflicto.
El representante de los empresarios menonitas, Dionisio Hildebrand, comentó que después del incidente del martes, la posterior lluvia hizo que el ambiente esté más calmado y que no se registren inconvenientes en las tierras.
Indicó que con el clima adverso la cosecha ha parado pero que siguen haciendo trabajos básicos en las tierras en conflicto. Añadió que también se registra una circulación más segura porque los labriegos no están reaccionando.
Amenazas
El jefe de seguridad ciudadana, el comisario Óscar Pedrozo, comentó que muchos trabajadores propietarios de camiones y máquinas que prestan servicio para la cosecha de la soja también son amenazados y para evitar inconvenientes mantienen constantemente un grupo de 20 uniformados en el lugar.
Añadió que muchos de los supuestos “sintierras” están abandonando la zona.
Por su parte, la fiscala que lleva la causa del enfrentamiento, Norma Salinas, comentó que en total fueron imputadas 69 personas como principales responsables de los continuos ataques a los productores y que todos ya cuentan con órdenes de captura.
Indicó igualmente que muchos son padres de familias que tienen a sus hijos en el lugar y que aún son inimputables.
Los labriegos habían amenazado en varias ocasiones que volverían a ingresar a las tierras y que no permitirán que se registren más siembras en el sitio, lo que preocupa realmente a los productores de la zona, que no pueden trabajar normalmente en sus cultivos.
Amenazas a propietarios
El jefe de seguridad ciudadana, el comisario Óscar Pedrozo, manifestó que muchos trabajadores propietarios de camiones y máquinas que prestan servicio para la cosecha de la soja también son amenazados y para evitar inconvenientes mantienen constantemente un grupo de 20 uniformados en el lugar. No obstante, la misma autoridad policial informó que muchos de los labriegos que estaban en el lugar acompañando las manifestaciones y hasta los enfrentamientos con los uniformados, han comenzado a abandonar el lugar “motu proprio” reduciendo así el nivel de tensión que se vive en la zona, luego de los incidentes del pasado martes que derivó en la imputación de 69 labriegos.