“La música paraguaya no está en decadencia. Surgen nuevos valores. Hay jóvenes intérpretes que se están proyectando con el folclore. Pero consideramos que se debe respetar la esencia rítmica, melódica y armónica de nuestras composiciones tradicionales”, dice Rigoberto Arévalo, destacado requintista y director musical.
El líder del grupo “Rigoberto Arévalo y su Trío de Siempre” tiene una trayectoria de 70 años en los escenarios nacionales y del exterior. Actuó junto a incontables artistas internacionales y grabó varios discos. Se inició en forma autodidacta en su Villarrica natal (29-01-1942), observando a su hermano Edelmiro. “Le pedí a mi mamá que me baje de encima del ropero la guitarra, porque Edelmiro no permitía que nadie toque su valioso instrumento. Así aprendí a tocar”, recuerda.
A los siete años, Rigoberto actuaba ya en su escuela “Ramón Indalecio Cardozo” y nunca olvida que de pequeño cantaba “Buenas noches mi amor”, imitando al cantante Roberto Yanés.
Setenta años atrás cruzó el río Paraná y viajó a Posadas (Argentina) con su hermano Victorino y considera ese tiempo como de iniciación artística. De niño, en Villarrica, formó el dúo Arévalo-Zaputovich, para después seguir con “Los Bemoles”, junto a Miguel Gómez y Rolando Cristaldo.
Se trasladó a Asunción y continuó el trío “Los Bemoles”, con los hermanos González, durante 25 años. En los años 60, la fama de “Los Panchos” le acercó intensamente a los boleros y la música melódica.
“En una de esas visitas de Los Panchos al país me acerqué a Alfredo Gill (1944-1981), para pedirle la medida exacta del requinto que es cinco escalas menos que la guitarra tradicional. Fui al mejor luthier, pero no quería hacerme, porque no se conocía ese instrumento. Hasta que Gill me acompañó y le explicó los detalles del instrumento y me fabricó. Tengo guardado como un tesoro para algún museo el primer requinto que se produjo en el Paraguay”, comenta orgulloso.
Rigoberto Arévalo es miembro fundador de Intérpretes del Folclore Asociados del Paraguay, Cooperativa de Artistas del Paraguay, Artistas Intérpretes y Ejecutantes, entre otras entidades. Con vasta experiencia, asumió el reto de presidir la Fundación Folcloristas del Paraguay que tiene por objetivo “enaltecer y preservar la música paraguaya”.
“Hace un año y meses, a pedido de mis colegas tomé el desafío de trabajar por el desarrollo de la auténtica música paraguaya. Y creo que vamos a alcanzar logros que darán qué hablar”, afirma entusiasta.
Los folcloristas que se han asociado a la entidad sin fines de lucro contribuyen a resguardar y promover las raíces auténticas del acervo sonoro local. Trabajan en la difusión, llevando espectáculos a comunidades donde jamás han llegado músicos, y a los compatriotas radicados en otros países.
Es el caso de la última gira que han cumplido en el mes de febrero pasado.
En respuesta a una invitación de la organización Red de Mujeres Paraguayas por el Mundo, una delegación artística compuesta por Rigoberto Arévalo y Su Trío de Siempre, Rito Pedersen, Marcos Brizuela, Raúl Aguayo, Paraguay 3, Mabel López y Renacer Musical, actuó en el Centro de Residentes Paraguayos en Mar del Plata. Fue durante un acto de celebración por el Día de la Mujer Paraguaya y en recordación de los 150 años de finalización de la Guerra de la Triple Alianza (1865-1870).
Luego, un show en casa de la familia Torres Vera para los paraguayos residentes en Lomas de Zamora, así como presentaciones en el Centro Cultural de la República del Paraguay, en Buenos Aires, y en un colegio de La Plata.