El pasado 18 de mayo, el departamento técnico de Planificación y Manejo del Ministerio del Ambiente y Desarrollos (Mades) recomendó rechazar el proyecto -que desafecta el Parque Médanos del Chaco-, o por lo menos, no acompañarlo.
Así se lee en la respuesta enviada al diputado Ever Noguera (ANR-Oficialista), presidente de la Comisión de Minería y Energía, que hizo una “solicitud de parecer técnico” al Ministerio.
El documento, al que tuvo acceso ABC Color, hace un pormenorizado análisis sobre todas las leyes que protegen a la zona de los Médanos del Chaco y los tiempos en los que se fueron aprobando.
Médanos del Chaco: Plan de Manejo del MADES
Menciona por ejemplo que el Parque Médanos del Chaco tiene su propio Plan de Manejo, que va hasta el 2027, y que en él se expone claramente que, como área silvestre protegida (ASP), no se puede ni se debe realizar prospecciones o exploraciones en busca de hidrocarburos u otro tipo de actividad que modifique el ecosistema natural de esta zona del Chaco.
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“Es parecer de esta dependencia ratificarse en lo establecido en el Plan de Manejo y no acompañar el proyecto de ley que modifica los artículos”, dice el informe, firmado por el licenciado Ramón Chilavert, jefe de dicho departamento.
El documento fue entregado al diputado Noguera el 22 de septiembre pasado. Llamativamente, un mes antes, el 2 de agosto, la Comisión de Energía ya aprobó el proyecto de ley para desafectar el Parque Médanos.
La propuesta legislativa cambia los artículos 4 y 6 de la Ley 5723 del 2016, que declara área silvestre protegida (ASP) todo el territorio del Parque Nacional Médanos del Chaco, de 605.075 hectáreas.
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Con estos cambios, se permite la prospección y exploración de la zona en busca de hidrocarburos, lo que desataría una destrucción irreparable en el ecosistema chaqueño, según el propio Mades y expertos ambientalistas.
Empresas “afectadas”
El diputado Edwin Reimer (ANR-cartista) fue el encargado de presentar el proyecto de ley para desafectar el Parque Nacional Médanos del Chaco.
Casi como un gestor privado, Reimer hizo figurar en su propuesta la lista de empresas que serán beneficiadas con la medida, ya que podrán llevar adelante la prospección y exploración de hidrocarburos en esa zona del Alto Chaco paraguayo.
Según Reimer, las empresas Primo Cano Martínez SA, Zeus Ol SA, Riviera SA y la estatal Petropar aparecen como las que “fueron afectadas” por haberse declarado, en noviembre de 2016, el Parque Médanos del Chaco como una ASP.
El proyecto de Reimer fue presentado ante el pleno de la Cámara de Diputados y fue aprobado el pasado 12 de octubre, por una mayoría de 44 votos a favor y 11 en contra. Entre quienes estuvieron a favor, resaltaron los colorados y los “liberocartistas”, que sumaron la mayor cantidad de votos.
En el 2019, la empresa Primo Canto Martínez promovió una acción de inconstitucionalidad contra la Ley 5723, buscando poder hacer sus exploraciones en la zona del Chaco. La Corte Suprema de Justicia (CSJ) rechazó este planteamiento.
Destrucción total
Ni bien se dio a conocer que este proyecto fue aprobado, las voces de organizaciones ambientales e incluso de autoridades vinculadas con el cuidado ambiental se unieron en un total rechazo.
“Una ley que desafecta un parque Nacional para prospección y explotación, implica, la destrucción total de grandes áreas del Alto Chaco que están en estado natural” dice Oscar Rodas, director de Cambio Climático y Políticas de la organización WWF.
Rodas explica lo que significa una prospección: “Se trata de la instalación de campamentos humanos, de movimiento de decenas de maquinarias pesadas, hablamos de la utilización de grandes espacios, de cientos de hectáreas. Hablamos de una deforestación total en esas áreas a ser utilizadas y de las excavaciones”.
Los indígenas, ninguneados
A pesar de que son los habitantes ancestrales de toda la zona donde está el Parque Nacional Médanos del Chaco, los indígenas no fueron tenidos en cuenta para saber sus inquietudes al respecto del proyecto de ley que desafecta el Parque Nacional para permitir la prospección y exploración del Parque.
“En la Constitución Nacional está claro y en las propias leyes, que no se puede tocar nuestro hábitat sin tener nuestro parecer, nuestro consentimiento, nuestra visión de lo que pretenden hacer” dice Isabelino Bogado, dirigente del Consejo del Alto Chaco para los pueblos Ñandeva.
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En el Parque Médanos del Chaco habitan al menos 130 familias de la comunidad Pykasu, del pueblo Guaraní Ñandeva.
Isabelino dice que no se tiene que olvidar que en esta zona del Chaco también conviven indígenas no contactados, que deben ser respetados en sus formas de vida.
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“Para nosotros es una clara muestra de discriminación. Estamos preocupados por esta situación, porque eso que quieren hacer implica que van a afectar todo nuestro entorno, toda nuestra forma de vida. Es una violación a los derechos de los pueblos indígenas” expone el dirigente en un guaraní enérgico.
Dijo que nadie ha consultado con su comunidad ni con otras comunidades adyacentes al Parque sobre esta propuesta que nació desde la Cámara de Diputados, y que fue presentado, justamente, por un diputado chaqueño; Edwin Reimer.
El acuifero Yrenda
Isabelino dice que lo más grave que se plantea con la idea de la explotación que se pretende es contaminar el acuifero Yrenda, que es una reserva de agua dulce muy importante para la región.
Unánime rechazo
La coalición #PorLosBosques, un conglomerado de al menos 30 organizaciones ambientales, advirtió mediante un comunicado, que la aprobación representaría un grave retroceso en materia de protección ambiental para el país.
“El Parque Médanos del Chaco, es el hábitat de familias del Pueblo Ayoreo en aislamiento voluntario y corresponde a la naciente del Río Timane, vital para la vida del Alto Chaco y los diferentes sistemas productivos” dice el documento.
Según estas organizaciones, el Médanos es la única área protegida del país que resguarda este ecosistema en Paraguay.
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“Es de vital importancia para la supervivencia de cientos de especies, como por ejemplo: las únicas poblaciones registradas en Paraguay de guanaco (Lama guanicoe), y de otras especies como el yaguareté (Panthera onca), el gato colocolo (Leopardus braccatus), el taguá (Catagonus wagneri).
Está también el tatú carreta (Priodontes maximus), la tortuga de patas rojas (Chelonoidis carbonarius); también especies emblemáticas de flora propia de la zona como el palo papel (Cochlospermum tetraporum)” expone el documento.
De igual manera, la Coalición señala que protege el único acuífero confinado de agua dulce en el Chaco; además de ser Zona Núcleo de la Reserva de la Biósfera del Chaco en Paraguay, reconocida por la UNESCO y posee varios sitios arqueológicos e históricos.
La Coalición hace un llamado para que los senadores rechacen totalmente la propuesta.