Salvo en algunos distritos del norte de la Región Oriental, como San Pedro y Canindeyú, que se vieron afectados por la escasez de lluvias, la siembra de soja está prácticamente concluida, con muy buenas expectativas y registros que superan el 95% de cobertura, explicó el titular de la UGP. Ahora, el sector sojero espera que las condiciones climáticas acompañen la siguiente etapa, decisiva, del cultivo, que es la de floración, que se desarrollará en diciembre.
“En el norte de la Región Oriental, todavía se enfrentan dificultades, aunque en el resto del territorio nacional la siembra ya se está culminando, con niveles muy avanzados, sobre todo en el centro y sur. Ahora, en diciembre, entramos en una etapa decisiva, la de mayor incidencia, que es la floración, es ahí cuando las lluvias serán fundamentales”, agregó.
Dijo que, si bien en algunas áreas se registran pérdidas, principalmente a causa de las últimas granizadas, los cultivos en general muestran un buen desarrollo, lo que también permite alimentar expectativas positivas con relación a la producción.
“Hay pérdidas puntuales donde hubo granizadas. Para el afectado si perjudica, porque le genera un sobrecosto volver a sembrar, pero a nivel nacional esto no incide. En general, hay buen desarrollo de los cultivos. A la par, las proyecciones climáticas dan cuenta de un régimen normal de precipitaciones para los próximos meses y esperamos este escenario se concrete”, manifestó.
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Buenas expectativas
Aunque todavía queda un largo camino por recorrer en términos del proceso de cultivo, las expectativas están fijadas en superar las 10 millones de toneladas de producción de soja para el ciclo 2024/25, resaltó el titular de UGP. “El clima aún juega un papel a favor y en contra para definir la cosecha. Se busca aumentar volumen y obtener una producción razonable, que permita dinamizar la economía”, agregó.
La estimación de la campaña 2023/2024 de la oleaginosa alcanza unas 10,47 millones de toneladas. Sin embargo, la baja de precios redujo significativamente los ingresos por exportación con respecto a la campaña anterior, casi con la misma cantidad exportada.
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“El precio se ve afectado por la oferta y demanda. Con Estados Unidos y Brasil teniendo buenas cosechas y siendo jugadores importantes, los precios de las commodities agrícolas siguen desinflados y hay que recordar que somos tomadores de precios. Por este motivo, se busca producir más para cerrar la brecha de los ingresos”, añadió.