En enero de 2025, rige reglamento 1115 de la Unión Europea

A partir del 1 de enero de 2025, entraría a regir la Ley N° 1115 de la Unión Europea, que prohíbe la compra de determinados productos obtenidos en zonas deforestadas a partir del año 2020. El exministro de Agricultura y Ganadería ingeniero agrónomo Moisés Bertoni habló sobre el punto en el programa ABC Rural Radio, y expresó su preocupación porque muchas de las exigencias son difíciles de cumplir, principalmente para los pequeños y medianos productores.

Ing. Agr. Moisés Bertoni.Gentileza
audima

La nueva ley de la Unión Europea sobre deforestación, que entra en vigor en 2025, genera incertidumbre en el sector agrícola paraguayo. El exministro Moisés Bertoni alerta sobre las dificultades que enfrentarán, especialmente los pequeños y medianos productores, para cumplir con las exigentes normativas.

“Realmente nos preocupa la entrada en vigor del Reglamento 1115 de la Unión Europea, que podría echar por tierra el modelo de desarrollo que costó muchos años lograr en Paraguay. Recordemos que en los últimos 20 años se tuvo un salto importante en el sector agrícola y ganadero, y que se han logrado mejorar las condiciones de vida de muchos compatriotas y a la vez la economía de todo un país; prácticamente veníamos creciendo un 4 por ciento anual, y ahora todo eso está en peligro con la vigencia de este reglamento”, empezó diciendo el exministro de Agricultura y Ganadería.

Soja, carne y madera deben cumplir

“La Unión Europea lleva adelante lo que denominan pacto verde, en donde ellos buscan tener una economía neutra para el año 2050, pero dentro de esas políticas que están aplicando, ellos consideran que al ser importadores tienen una gran responsabilidad sobre la deforestación a nivel mundial, entonces, dicen que no van a comprar más productos que provengan de áreas deforestadas a partir del año 2020. En el caso de Paraguay, se aplicaría a la soja, la carne y la madera; pero además del tema deforestación están otras exigencias”, destacó.

Certificar cosas sobre las que no existe certificación

Además de la exigencia de producir en zonas no deforestadas desde el 2020, hay otras más complicadas que los productores deben cumplir. “El productor tiene que cumplir con otras exigencias que denominan “Diligencia Debida”, tiene que georreferenciar la parcela donde se produjo el grano, por solo citar alguna que se puede cumplir, pero hay otras que son muy difíciles de documentar, demostrar o cumplir, por ejemplo; si uno tiene problemas con comunidades indígenas, si somos o no corruptos, si respetamos los derechos humanos, o sea, no existen certificados para estas cosas, y es allí donde todo esto se complica”.

El productor deberá gestionar certificaciones, y no hay ningún beneficio extra

El productor tiene que gestionar todas estas exigencias; por ahí, si trabajan con entidades o empresas podrían recibir ayuda, pero básicamente debe hacerlo él mismo. Por otro lado y no menos importante, no hay ningún beneficio económico para el productor paraguayo por cumplir estas exigencias de la Unión Europea, ni económico, ni social, ni ambiental, que le ayude a mejorar su producción”, confirmo el profesional.

Argentina, principal comprador de soja, preocupado

“Desde el año 2016 aproximadamente gran parte del grano de soja que producimos lo enviamos a Argentina, que lo mezcla con sus granos de soja para mejorar su tenor de proteína, y lo envía a la Unión Europea, por tanto esto debe ir acompañado de documentos, de la finca al silo, del silo a la procesadora, de la procesadora a la barcaza, y es algo complejo, porque la soja que no tenga esta documentación no se puede mezclar, con otra soja. Es importante destacar que nosotros tuvimos contacto con colegas de Brasil, Argentina, EE.UU. y todos estamos en la misma situación”, explicó.

Se vienen más restricciones

“Hoy día tenemos 3 productos (soja, carne y madera) que están dentro de este reglamento 1115 de la Unión Europea, pero ya nos avisaron que a corto plazo ingresará el maíz, y también el arroz. Otra cosa que nos preocupa, es que dentro de las exigencias de la UE entrarían otros ecosistemas, no solo bosques, sino también los humedales, que por ejemplo, afectarían directamente a la producción de arroz que está en expansión, y que utiliza ese tipo de ecosistemas. También está el tema del cambio de uso de suelo, o sea, pasar a convertir un campo que era de pasturas, a campos agrícolas, y eso no lo aceptan”, dijo.

900.000 hectáreas en manos de pequeños productores

“Todavía no tenemos una cifra de cuánto podría perjudicar a los productores este Reglamento 1115, pero sí sabemos que los principales golpeados serán los pequeños, y actualmente hay 900.000 hectáreas en manos de aquellos con menos de 20 hectáreas. Muchos de esos ni siquiera tienen título, y una de las principales exigencias de la Ley 1115 es tener título y demostrar que son propietarios. La siembra de soja empieza en setiembre, y prácticamente esa documentación debe estar lista para cuando se envíe, realmente estamos preocupados”, finalizó Bertoni.

Lo
más leído
del día